El PNV se queda solo con su «actualización del autogobierno vasco»

El PNV ha trasladado esta mañana sus «bases para la actualización del autogobierno vasco», que en gran medida replican la propuesta que aportó a la fallida ponencia parlamentaria dedicada a esta materia -y que ahora aspiran a reabrir-. Lo ha hecho, en mano, a los tres grupos que han accedido a reunirse por separado: PP, PSE y UpyD. Bildu, el grupo con el que podría encontrar más puntos de entendimiento, rechazó acudir siquiera al calificar de «política teatro» el movimiento de Sabin Etxea. La mañana se ha cerrado sin avances de ningún tipo.

Tras los tres encuentros bilaterales, el presidente peneuvista Andoni Ortuzar ha mantenido que ve «mimbres» para llegar a un consenso en la presente legislatura, con solo un par de meses de actividad parlamentaria por delante si se mantienen las elecciones para el mes de octubre. La realidad es que, además del vacío de Bildu, PP y UpyD han manifestado su esperado rechazo y el PSE ni siquiera ha querido comparecer para fijar su postura.

La principal novedad, aunque leve, que presenta el documento de «bases» en los nueve puntos que recogen la oferta del PNV reside precisamente en el último de ellos, el dedicado al «derecho a decidir». Los nacionalistas vascos admiten que esta cuestión «necesita una profundización en relación a su legitimación, ámbitos de decisión, clarificación de las condiciones democráticas de su apelación y vinculación al ordenamiento jurídico-legal».

Sin embargo, los grupos parlamentarios que estuvieran dispuestos a suscribir el documento tendrían que comprometerse a «defender que las decisiones que sobre su futuro político adopte libre y democráticamente la ciudadanía vasca sean respetadas por las instituciones del Estado». Añade, eso sí, que «dichas decisiones se adoptarán siguiendo las normas y procedimientos legales, y respetando los métodos democráticos y los derechos y libertades de la ciudadanía».

Por lo demás, insisten en una reforma del autogobierno que se plasmaría en la próxima legislatura, al dar por agotado el Estatuto de Guernica, desligado de una reforma constitucional y sometido a referéndum; el reconocimiento de la «identidad nacional» del «pueblo vasco»; una actualización también del Concierto económico; capacidad de representación ante la Unión Europea; y una nueva relación bilateral con el Gobierno central.

«Se acabó la broma»

«Creemos sinceramente que estos elementos nos dan mimbres suficientes sobre los que construir un acuerdo político, un mínimo común denominador suficiente que nos permita pasar a la redacción de un texto articulado», ha sido la lectura que ha extraído Ortuzar pese a marcharse sin una sola respuesta favorable. La de Bildu tendrá que esperar: les han enviado su documento por correo electrónico.

«No estamos dispuestos y no vamos a jugar en base al guión del PNV a una independencia por plazos y tampoco estamos dispuestos a aceptar el derecho de autodeterminación aunque se formule con otros eufemismos como el derecho a decidir», ha respondido por parte del PP su portavoz parlamentario Borja Semper. A su juicio, el PNV actúa condicionado por el «momento preelectoral» y ante una «legislatura que acaba sin avances que el lendakari manifestó que era fundamental para su gobierno».

«Tengo la amarga sensación de que le hemos bailado el agua al PNV todos en este país. Se acabó la broma. O concretan o desde luego con el PP no hay más recorrido», ha zanjado.