Iñigo Errejón, número dos de Podemos, flanqueado por los cabezas de lista de Vizcaya y Guipúzcoa, en Baracaldo
Iñigo Errejón, número dos de Podemos, flanqueado por los cabezas de lista de Vizcaya y Guipúzcoa, en Baracaldo - EFE

Elecciones - País VascoPodemos gana por votos pero el PNV se impone en número de escaños ante el desplome de Bildu

La coalición de la «izquierda abertzale» pasa de seis a dos diputados, reducida a cuarta fuerza por detrás del PSE

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Seísmo en el País Vasco en las elecciones generales de este domingo. La irrupción de Podemos ha sido de tal magnitud que se ha situado como el partido más votado en la comunidad autónoma, donde la participación ha superado el 70%, con más de 300.000, por delante de las dos fuerzas nacionalistas, PNV y Bildu. El reparto de escaños en el Congreso, sin embargo, beneficia a los «jeltzales», que pasan de los cinco que obtuvieron en 2011 a seis, uno más que Podemos. Todo un aviso, en cualquier caso, para las elecciones autonómicas del próximo año.

«Ahora los vascos y vascas nos han dado su confianza. Tenemos que estar a la altura de una sociedad avanzada que exige un futuro de convivencia.

Podemos va a ser un agente central en todo lo que ocurra en Euskadi en los próximos años», indicó durante su comparecencia el líder de Podemos en Bilbao, Lander Martínez. «Somos una fuerza que ha nacido después del cese de violencia de 2011 y formadas por gente que vienen de pensar diferente y de votar diferente. Es nuestro deber convertir esa pluralidad y esa diversidad en una fortaleza al servicio de la convivencia de Euskadi. Tenemos por delante una tarea histórica en Euskadi».

«Euskadi es diferente y Euskadi ha votado diferente. Esta vez ha votado más diferente aún. El PNV ha aguantado su posición, incluso ha aumentado su representación. Hemos consolidado el grupo vasco a pesar de la irrupción de dos nuevos partidos políticos», fue la lectura del presidente jeltzale, Andoni Ortuzar. «Pese a haber padecido una campaña donde se ha ninguneado tanto al PNV como a Euskadi», afirmó, su partido «se consolida como voz vasca en Madrid. Seguirá siendo la voz de Euskadi en Madrid».

El desplome de Bildu es absoluto: no solo pasa a ser la tercera fuerza en votos, a más de diez puntos porcentuales de distancia del grupo que lidera Pablo Iglesias, sino que se despeña desde los seis diputados que obtuvo Amaiur, marca con la que concurrieron los herederos de Batasuna hace cuatro años, hasta los dos con los que se conforma a partir de hoy. «Es una noche triste, no lo vamos a ocultar», la ha definido sin rodeos el líder de Sortur, Hasier Arraiz, quien ha culpado a la «lógica estatal». «Hoy nos hemos caído y mañana toca levantarse», ha asumido.

Retroceden PSE y PP

En cuanto a los dos grandes partidos nacionales, sufren el mismo retroceso en término de diputados: el PSE pasa de cuatro a tres y el PP de tres a dos. Donde la caída es más acusada es en número de votos, al quedar sus apoyos mermados hasta prácticamente la mitad de lo obtenido en 2011.

«El PP sigue siendo la principal garantía que tiene España para la estabilidad y lo vamos a ejercer a partir de mañana en el Congreso de los Diputados y en el Senado», señaló el líder del PP vasco, Alfonso Alonso, que repite como diputado por Álava. «Vamos a tener que trabajar duro a partir de ahora y lo vamos a hacer porque estamos forjados en las dificultades y nos crecemos cuando las responsabilidades son importantes», subrayó.

La secretaria general de los socialistas vascos, Idoia Mendia, se aferró a los mil votos más conseguidos con respecto a las últimas elecciones municipales y forales para apuntar a «un cambio de tendencia con respecto a los últimos años, en los que experimentó una constante pérdida de apoyo ciudadano, y un síntoma inequívoco de que los socialistas vascos recuperamos espacio en el panorama político vasco».

Como se esperaba, Ciudadanos no logra ningún escaño. En su contra jugaba la oposición del partido que encabeza Albert Rivera a preservar el sistema fiscal propio del País Vasco o completar la llegada del AVE, prevista para 2019.

Podemos ya había avisado de sus intenciones en las elecciones municipales y forales del pasado mes de mayo, primera ocasión, en toda su historia, en la que se sometía al escrutinio de las urnas en el País Vasco. En el caso de los Ayuntamientos, al concurrir bajo «marcas blancas», resultó difícil estimar el impacto del partido morado. Pero sí se presentó como tal en las tres Diputaciones, donde por suma de votos se situó como tercera fuerza por detrás de PNV y Bildu.

Los electores, a la luz de los resultados de anoche, pasaron por alto los problemas internos de Podemos Euskadi, que hace apenas mes y medio asistió a la desbandada de la gran mayoría de su cúpula, con su hasta entonces secretario general, Roberto Uriarte, a la cabeza. Expresaron así su descontento con la dirección nacional, por injerencias en la conformación de las listas electorales. Tampoco le pasó factura a Pablo Iglesias ser el único líder nacional que no visitó el País Vasco durante la campaña.

Vizcaya, única fiel al PNV

Por provincias, en Álava de nuevo ninguna fuerza logra más de un diputado de los cuatro que reparte esta provincia: un representante obtienen Podemos, PP, PNV y PSE. Pero hay novedades con respecto a 2011: se queda sin escaño Bildu. Podemos se sitúa como el partido más votado; también en Vitoria.

En Guipúzcoa, Podemos es también la fuerza que concita más votos (lo consigue también en la capital, San Sebastián) y empata en número de diputados con el PNV (que sube uno), con dos. Se despeña la «izquierda abertzale» al pasar Bildu de tres a uno. El otro representante es el que conserva el PSE. Se queda sin representación el PP, y en concreto su cabeza de lista, Borja Sémper.

Finalmente, Vizcaya es la única de las tres provincias donde Podemos no es el primer partido por número de votos. Se aferra a su fuedo histórico, con Bilbao a la cabeza, el PNV, lo que le permite conservar sus tres diputados, por los dos de PSE y uno de Podemos (pierde uno) y PP (repite).

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