Los test de antígenos en farmacias y clínicas dentales empiezan a cuentagotas
Solo hay 43 boticas activas de las 172 apuntadas y 75 dentistas preparados para su nueva misión
De tres boticas que dispensan en el corazón del barrio de La Latina, en los alrededores del Mercado de La Cebada, solo una emprendió este jueves su nueva misión. Hasta 247 farmacias y clínicas dentales de la región estaban listas para realizar test de antígenos , pero la anhelada estrategia, que ha enfrentado durante tres meses a los gobiernos de Sol y Moncloa y recibió el visto bueno hace dos semanas, arrancó a cuentagotas . Solo 43 farmacias están activas , según la última actualización de la Consejería de Sanidad, a las seis de la tarde de este jueves.
La Paloma es uno de los 172 establecimientos preparados para apoyar a la Comunidad de Madrid en el cribado masivo entre la población asintomática . Pero este local de estantes y mostradores de madera, en la calle de Toledo, no disponía de pruebas este jueves por la mañana. «Todavía no hemos empezado. No hemos recibido los test y no sabemos nada. Creemos que empezaremos la semana que viene, porque ya es jueves», fue la escueta explicación de una de las empleadas. A unos pocos metros, al otro lado de la calle, otra farmacia no ha podido sumarse a la iniciativa. «Nosotros solo vendemos test para hacerlos en casa, aquí no tenemos hueco», justificaba uno de sus propietarios.
La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso , escuchó en otoño la petición de los farmacéuticos, que desde el estallido de la crisis sanitaria ofrecieron sus negocios como perfectas bases de operaciones diseminadas por toda la región para realizar diagnósticos. La dirigente lo solicitó formalmente al Gobierno central en octubre; tres meses más tarde, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, reconoció que la decisión le correspondía a las comunidades autónomas.
El Ejecutivo regional se apresuró a firmar sendos convenios con los colegios profesionales de farmacéuticos y odontólogos. «Hoy es un gran día puesto que Madrid vuelve a demostrar que sigue a la vanguardia, luchando e innovando contra la epidemia», proclamó entonces Ayuso, que fijó el pistoletazo de salida la semana del 1 de febrero .
Falta de información
La puesta en marcha, sin embargo, ha transcurrido a trompicones a lo largo de la semana. Este jueves, el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Madrid solo pudo precisar que 75 clínicas dentales de las 3.500 abiertas habían empezado a recibir los test en los últimos días. «No sabemos si van a empezar a derivar ya a los pacientes», trasladaron a ABC. Mientras tanto, el vicepresidente del colegio, David Rubio, celebró la campaña: «Facilita y amplía el muestreo, la capacidad de detección por parte de la Consejería. El beneficio, desde luego, es que los ciudadanos puedan acudir a centros seguros».
La Dirección General de Salud Pública mantiene el plan que inició el pasado septiembre: convocar por SMS a ciudadanos aleatorios de las zonas con mayor incidencia del Covid-19. La primera jornada culminó con 1.072 citaciones para una semana . Uno de los primeros seleccionados acudió este jueves a la farmacia en la plaza de la puerta de los Moros, la misma que eligió Ayuso para anunciar el inicio de las pruebas.
Pilar Valera bajó por la mañana a la planta sin ventanas bajo su botica, y en una salita con ventilación forzada se enfundó en un traje EPI e hizo lo que hacía meses que quería hacer . La única muestra nasal que tomó fue de una mujer que dio negativo. «Como sanitarios que estamos en primera línea, sabemos lo que el público necesita. Ellos quieren saber si son positivos o negativos ya. Vienen a la farmacia demandando que nosotros les ayudemos», escenificaba Varela quien, como otros 2.000 farmacéuticos, ha superado el curso de reciclaje para poder realizar los test.
Aún se desconoce la cantidad de pruebas que se repartirán a las farmacias y clínicas dentales. Varela contaba este jueves con tres cajas de 50 test cada una. «Pero me han dicho que los que necesite», puntualizó. A pesar de que sus demandas se han cumplido, las administraciones han reaccionado tarde. «Si esto se hubiese hecho antes de Navidad, a lo mejor habríamos evitado muchos contagios» , opina. Por ahora, se ha comprometido a atender a seis pacientes cada hora de 11 a 13 horas de lunes a viernes. La Consejería de Sanidad le remitirá la fecha y hora de las citas confirmadas. «Ahora nos toca no contagiarnos», sonríe bajo la mascarilla.
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