El fastuoso monumento con el que Madrid «lloró» la prematura muerte del Rey Alfonso XII

Los ciudadanos sufragaron mediante suscripción popular la imponente estatua ecuestre del monarca que hoy corona el Parque de El Retiro

Inauguración del monumento a Alfonso XII el 3 de junio de 1922 ARCHIVO DE ABC
Marta R. Domingo

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Cuando la mortal epidemia de cólera comenzó a atacar a la población de Aranjuez en 1885, el Rey Alfonso XII, conocido como «El Pacificador» , quiso visitar a los afectados. Ante el riesgo que esta decisión entrañaba para la salud del Monarca, el Gobierno, entonces presidido por Antonio Cánovas del Castillo, le denegó el permiso. Sin embargo, el 2 de julio de aquel año el Rey partió hacia el municipio madrileño sin hacer caso a las advertencias. Ordenó que se abriera el Palacio Real para alojar a las tropas enfermas. Y visitó el Convento de San Pascual , donde casi todas las monjas habían sido contagiadas. Ciego ante el peligro de una posible infección, se acercó a consolar a los pacientes y a repartir ayuda. Cuando el Gobierno fue informado del viaje del soberano, envió al ministro de Gracia y Justicia, al capitán general y al gobernador civil para que persuadieran al Monarca de volver de inmediato a la capital.

Imágenes de la Familia Real en la inauguración del monumento ARCHIVO DE ABC

A su regreso, según reseñan las crónicas de la época, los madrileños, enterados del gesto generoso del Rey, le recibieron en la estación de Atocha con «una entusiasta y espontánea ovación». La prensa ensalzó el episodio de forma unánime.

Apenas unos meses después, el 25 de noviembre, Alfonso XII murió en el Palacio Real de El Pardo a los 27 años aquejado de tuberculosis. Su muerte prematura sacudió de tal manera a los españoles que las Cortes aprobaron por ley erigir una gran estatua ecuestre , que sufragaron los ciudadanos con sus aportaciones voluntarias, para honrar la memoria del malogrado Rey.

Desfile militar en la inauguración del monumento ARCHIVO DE ABC

Tras muchas vicisitudes, el 18 de mayo de 1902, el día siguiente a la coronación de su hijo Alfonso XIII , ya mayor de edad, se colocó la primera piedra del monumento. A esta fastuosa ceremonia asistieron miembros de la Familia Real, príncipes extranjeros y diplomáticos. El acto de inauguración de todo el monumento, el 3 de junio de 1922, contó con la presencia del joven heredero, el general Milans del Bosch , las autoridades militares y la plana mayor de la Policía. Las tropas militares abrieron el acto con un vistoso desfile.

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