La edil del PSOE que denunció a Sara Hernández por amenazas conservará su acta

A apenas 24 horas del juicio por presuntas coacciones y amenazas, la edil socialista que denunció a la alcaldesa de Getafe y líder del PSOE-M ha ganado el primer pulso. Mónica Cerdá, que acusó a Sara Hernández de amenazarla para que dimitiese, conservará su acta de concejal sin formar parte del Gobierno local, tal y como solicitó desde el primer momento.

El PSOE anunció ayer en la Junta de Portavoces que no se dará cuenta de esta renuncia, prevista en el tercer punto del orden del día de la sesión del próximo miércoles, porque «no hay nada sobre lo que tratar». La razón es que el secretario del órgano ha atendido el escrito presentado por Cerdá, en el que solicitaba dejar sin efectos su dimisión porque no había pasado por la cámara municipal.

El PSOE aseguró el pasado 31 de marzo que la edil dimitió por «motivos personales», pero su versión es muy distinta. Como ha informado ABC en los últimos días, dejó el cargo bajo las supuestas amenazas de la alcaldesa, que no aceptó su petición de quedar como concejal «rasa», fuera del Gobierno.

«Vamos a acabar con tu reputación»

Según su denuncia, la secretaria general de los socialistas madrileños la coaccionó bajo la premisa de que si no se marchaba como ella decía «acabaría con su reputación política» a cualquier precio; «si no tienes trapos sucios los inventaremos», dijo la regidora, según el testimonio del abogado de Cerdá. La raíz del conflicto está en la reestructuración que Sara Hernández hizo de su equipo. La concejal presuntamente amenazada quedó defenestrada al pasar de gestionar las áreas de Empleo y Desarrollo Económico y las empresas municipales Gisa y Alef para asumir a la fuerza Juventud y Salud y la nueva concejalía de Transparencia y Calidad, sin peso ni decisión.

Después de esta supuesta intimidación, de tres horas en un despacho, denunció a Hernández y su mano derecha, Cristina González, imputada por su implicación en el caso Aparcamientos. Ambas comparecerán hoy en el Juzgado de Instrucción Número 3 de Getafe en un juicio por delito leve. Según el representante legal de Cerdá, no se descarta el aplazamiento porque han solicitado la presencia de testigos como prueba.