División entre los comerciantes de la calle Boltaña por la peatonalización prevista por el Ayuntamiento
Buena parte de los minoristas está de acuerdo con esta medida, pero exigen la ampliación de un aparcamiento próximo al lugar. Otros, sin embargo, defienden que «el 85% de los clientes» son gente del barrio que acude a pie
Las actuaciones enmarcadas en 'Madrid 360', uno de los pilares estratégicos de la legislatura de José Luis Martínez-Almeida, pretenden reducir las emisiones contaminantes en la capital convirtiendo 10 kilómetros de calzada en tramos peatonales, una medida que ha sido aplaudida por un sector mayoritario de los madrileños. Sin embargo, una de las vías seleccionadas, la calle Boltaña , ha creado una fuerte división respecto a su peatonalización entre los comercios minoristas allí establecidos.
El Ayuntamiento de Madrid tiene previsto que los 207 metros que mide esta arteria, ubicada entre Torre Arias y San Mariano, en el distrito de San Blas-Canillejas, sean peatonales antes de que finalice 2021 . Esta noticia ha inquietado a buena parte de los comerciantes de Boltaña, que se han mostrado preocupados porque, dicen, puede afectar a sus negocios . Por ello, desde hace tiempo, todos los miércoles, a las 12 horas, estos afectados salen a la puerta de sus establecimientos a hacer una cacerolada como señal de protesta, además de haber llevado a cabo una recogida de firmas, que ya supera las 500.
José Pérez, empleado de la farmacia R. Patrón, explica que el problema no es que la calle sea peatonal o no, sino que la gente que acude en coche desde otros barrios cercanos tenga donde aparcar cuando vaya a hacer sus compras. «Lo que queremos es que se haga un aparcamiento disuasorio, porque esta calle abastece a mucha gente que no vive en el barrio , que vienen de la Piovera, Alameda de Osuna, las Rosas y vienen con los coches a hacer la compra», sostiene.
Varios comerciantes insisten en la importancia de un parking e, incluso, están dispuestos a colaborar para que sea gratuito y así los ciudadanos puedan seguir yendo a esta calle. «Que la quieren peatonalizar y dejarla bonita con jardineras, estupendo, mejor para el barrio, pero que la gente tenga el modo de venir, que es lo que nos interesa a nosotros ; que la gente pueda seguir viniendo», manifiesta este farmacéutico.
Otra de las propietarias que cuenta con un local en este enclave, Leopoldina Meza, cree que finalmente la obra se llevará a cabo, pero dice que seguirán empujando para lograr un parking acorde al número de clientes que se desplazan. « Mi petición es que si peatonalizan, haya una solución para el aparcamiento. Aquí detrás hay un parking en el que deberían hacer más plazas, hacer alguna obra. Los comerciantes podríamos llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento y que nos cobraran por algunas plazas, porque sabemos que el Ayuntamiento no tiene dinero para una obra como esta y así podríamos ayudar un poco», señala la dueña de la tienda de regalos 'Babel'.
El aparcamiento al que se refieren los comerciantes se encuentra ubicado en la calle San Mariano , haciendo esquina con la calle Alcalá. El 17 de mayo de 2017 fue aprobada su remodelación por la Junta Municipal del Distrito por parte de PP, PSOE y Ciudadanos, solo votando en contra Ahora Madrid. La propuesta consistía en reformar el aparcamiento haciéndolo subterráneo a dos alturas y estableciendo en la superficie unas instalaciones deportivas, pero todavía no se ha ejecutado el plan .
Numerosas plazas de carga y descarga
La otra cara de la moneda en este conflicto la encabezan los propietarios de la cafetería Karina's, Javier Pulido y Agustín Blázquez, que están a favor de que se peatonalice la calle. Ellos defienden que han realizado un estudio cuyos resultados establecen que «en torno al 85% de los clientes» que compran en Boltaña son gente del barrio, que tienen más de 50 años y acuden a pie; no usan el coche .
En ese sentido, Javier cuenta que en esta vía hay 150 metros de aparcamientos que son de carga y descarga , mientras que los metros de estacionamiento libre para turismos son 180 metros. «Los vehículos de carga y descarga estacionan desde por la mañana hasta prácticamente por la noche. No se mueven, es decir, que no hay continuidad en la carga y descarga y esas plazas están ocupadas siempre», apunta.
Las plazas de aparcamiento disponibles son para 32 coches de uso particular, pero Javier asegura que en este caso pasa lo mismo: «Siempre hay algunos que no se mueven: hay entre seis y diez vehículos que se quedan perpetuos entre una semana y cinco meses , como aquel de allí que lleva estacionado cinco meses. Pertenecen a particulares y comerciantes». Por tanto, de las 32 plazas, rotan unas diez y este hostelero afirma que «siempre desde por la mañana a primera hora, las ocupan personas que trabajan en la zona, con lo cual no queda prácticamente ningún sitio para el público».
El tema de la carga y descarga es un problema en Boltaña. Actualmente su horario es de ocho de la mañana a dos de la tarde y de cuatro y media de la tarde a siete. Si la calle finalmente se peatonaliza, esta franja pasaría a ser de 9 a 11 horas y estas zonas reubicarían, según comentan algunos comerciantes. El tramo del día en el que hay más aparcamiento disponible, de dos a cuatro y media, los negocios están cerrados y, por esta razón, los hosteleros de Karina's piensan que sería buena idea que todos los establecimientos abrieran en esa franja horaria y así incentivar las compras: «En el caso de que no se peatonalizara la calle, nosotros propondríamos que de dos a cinco esté todo el comercio abierto para que realmente el público que viene en vehículo pueda comprar a esa hora, porque a esa hora está cerrado prácticamente todo el comercio ».
Agustín considera que hacer la calle peatonal traería «más modernidad, más higiene y menos contaminación ambiental y acústica», puesto que ahora mismo «hay mucho ruido y suciedad por culpa del constante tráfico que tiene esta vía». No opina igual Verónica Rodríguez, propietaria de la farmacia R. Patrón, que estima que los pequeños establecimientos de alimentación se acabarán marchando y los locales vacíos podrían convertirse en bares y terrazas : «Nosotros pensamos que podrían hacerse muchos bares de copas y haber mucha juerga nocturna, y no creo que por la noche a los vecinos les guste que esto se convierta en un sitio de muchas voces, ruido y suciedad».
Los residentes, por su parte, quieren lo que más beneficie a los minoristas y se decantan por la opción que creen que beneficiaría a estos pequeños negocios. Unos prefieren que no sea peatonal, como es el caso de María Raquel, de 82 años: «No estoy de acuerdo porque va a destruir el comercio». Mientras, otros creen que la obra será positiva para estos establecimientos : «Una calle peatonal le vendría mejor al comercio», opina Rosa, de 88 años. La conclusión la hace Carolina, de 41 años: «Lo que le venga mejor al comercio» .
