Desde las 6:05, huelga de conductores en el Metro

Desde las 6:05 de la mañana, apenas abiertas las puertas del Metro, los conductores iniciarán este viernes una huelga que puede convertirse en indefinid a. Afectará a los cientos de miles de madrileños que toman cada día ese transporte público, dado que los paros se reparten en varios tramos horarios de mañana, mediodía y tarde, pero siempre en los «picos» de tráfico de viajeros.

Concretamente, habrá paros entre las 6:05 y las 8:40 horas, de 13:20 a 16:25 horas, y de 17 a 19:55 horas. Estas son las «horas punta» del tráfico de viajeros en el Metro, que es sin duda el principal medio de transporte público en la ciudad, por el que se realizan anualmente más de 560 millones de viajes.

La de este viernes será la primera jornada de unos paros que, según lo convocado, se repetirán el lunes y el resto de los viernes del mes de marzo. La compañía ha decretado unos servicios mínimos del 65 por ciento de media respecto a los trenes que circulan habitualmente. Los horarios de los paros parciales son: de 6.05 a 8.40 horas; de 13.20 a 16.25 horas y de 17 a 19.55 horas, según ha informado el sindicato. Defienden que la huelga se reparta a lo largo de todo el día porque así pueden participar en ella trabajadores de todos los turnos.

Servicios mínimos

Metro ha fijado unos servicios mínimos del 65 porciento este viernes para los paros de la franja de mañana de este viernes, del 68 por ciento para la franja del mediodía (salvo el lunes que serán en este horario del 59 por ciento) y del 59 por ciento para los paros convocados por la tarde, salvo el lunes que se dispondrán de, como mínimo, el 67 por ciento de los trenes en esta franja horaria. Los sindicatos los consideran abusivos. La compañía, por su parte, entiende que son los imprescindibles para garantizar el desplazamiento de los madrileños.

De momento, no hay acercamiento de ningún tipo entre las posturas del sindicato y de la empresa. Los conductores reivindican oficialmente que les sea reconocida la categoría de «maquinistas de tracción eléctrica», lo que supone equipararlos con los conductores de trenes de Cercanías. Entienden que de este modo estarían cubiertos legalmente frente a determinadas enfermedades profesionales propias del ejercicio de su trabajo, algo que ahora no ocurre. Por este motivo, instan a la empresa a negociar «lo antes posible», para «no prolongar los paros ni un día más», y piden reunirse «con carácter urgente» con la directiva de Metro de manera que el conflicto no se alargue y el prejuicio para los usuarios sea el menor posible.

Desbloqueo y paros

Pero la empresa no está dispuesta a sentarse a negociar hasta que no se desconvoquen los paros. «Cualquier desbloqueo de la situación generada» pasa, insistieron fuentes de la compañía, por esa premisa. Además, temen que el conflicto se pueda complicar como consecuencia del despido de un trabajador que, el pasado diciembre, cuando llegó a la estación de Hospital de Fuenlabrada desalojó el convoy de viajeros y dejó el servicio, pese a las instrucciones del centro de control, por considerar que su jornada laboral había terminado.

Los últimos paros de Metro que sufrieron los madrileños tuvieron lugar el pasado mes de junio. Convocados también entonces por el sindicato de maquinistas, pero con el apoyo de otros sindicatos, luchaban entonces por el convenio colectivo. Todas las organizaciones de trabajadores, excepto el sindicato de maquinistas, firmaron finalmente el convenio hace tres meses, con vigencia hasta el año 2019.