La Policía estrecha el cerco sobre el asesino del clan de Los Visita que acuchilló a Paco

La Policía Nacional activó hace unos días una orden de busca y captura contra el presunto autor del asesinato a puñaladas el pasado domingo de Francisco D. C., de 64 años, en el Pozo del Tío Raimundo, que ya ha sido identificado y del que no se descarta su inminente detención. Se trataría, según algunos testigos oculares, de un conocido miembro del clan de Los Visita, residente en el número 12 de la calle de Esteban Carros. El sujeto huyó junto a otros integrantes de su familia nada más perpetrar el crimen.

Mientras la investigación avanza, los vecinos sublevados volvieron a asegurar esta mañana que el domingo acudirán a El Rastro, el mercadillo del barrio, donde al parecer tiene un puesto de frutas y verduras uno de los familiares del presunto autor de las puñaladas, para asegurarse de que «nadie le compra nada».

En esta zona, algunos de los concentrados el martes quemaron al menos un camión y llegaron a provocar daños en furgonetas y coches aparcados en la calle frente a la vivienda como símbolo de «venganza» , lo que hizo que agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) y de Policía Municipal tuvieran que rodear la vivienda del supuesto autor del apuñalamiento. Los hechos se volvieron a repetir ayer por la noche, si bien, en este caso, solo fue apedreada una furgoneta.

Las protestas regresarán esta tarde a las 19 horas. El concejal presidente de Puente de Vallecas y Villa de Vallecas, Paco Pérez, ha hecho este jueves un llamamiento a recuperar «la tranquilidad y la convivencia» . En declaraciones a Efe, ha abogado por dejar actuar a los cuerpos policiales para que detengan a los responsables de este asesinato y los pongan a disposición judicial.

Pérez ha pedido el fin de la convocatoria, a través de las redes sociales, de concentraciones frente a la casa de la familia del presunto asesino, por considerar que son «contraproducentes» y que «lejos de recuperar la normalidad pueden provocar enfrentamientos indeseados y fracturas en la convivencia que pueden tener un coste en el futuro». El edil, que estuvo presente en la concentración de ayer, ha asegurado que «no hubo carga policial como tal» , sino que se paró «un intento de ataque a la vivienda de esta familia».