La Xunta aplicará cortes de agua en 90 días si no baja el consumo

El Gobierno autonómico da de plazo tres meses para que los gallegos, tanto particulares como empresas, disminuyan el consumo de agua . De lo contrario, informó ayer Alberto Núñez Feijóo, comenzarán a aplicarse cortes en el suministro durante algunas horas del día. Durante la presentación del pacto de los alcaldes contra el cambio climático, el presidente de la Xunta hizo un llamamiento para disminuir la presión sobre los embalses. «Si no, vamos a tener que llegar a restricciones», alertó.

Feijóo calificó la situación de sequía, la más severa de los últimos cuarenta años en la Comunidad, como «preocupante» y cifró en 90 los días en los que el abastecimiento no revestirá mayores problemas , aunque dependiendo de la zona el plazo podría alargarse hasta los cuatro meses. El responsable del Ejecutivo autonómico defendió, asimismo, la reacción de las administraciones para poner en marcha nuevas «infraestructuras hidráulicas».

El último ejemplo es el de Vigo, después de que Augas de Galicia y los concellos del área metropolitana dieron luz verde al bombeo de agua del río Verdugo ; una obra valorada en 5,4 millones de euros que asumirá el consistorio vigués. Entrentato, el alcalde, Abel Caballero, anunció ayer que su equipo se plantea la solicitud de barcos-tanque para responder a la escasez en el embalse de Eiras. «Pueder ser la única de las opcions posibles si no llueve».

En su intervención ante una veintena de regidores, Feijóo admitió que no existe «un objetivo más prioritario» que garantizar el abastecimiento y el saneamiento del agua , una tarea que debe comenzar, dijo, por «concienciar» a los ciudadanos de su «enorme valor». «Galicia tiene capacidad para ser el gran país, dentro de España, de reserva hidráulica», enfatizó.

Sequía, abastecimiento y cambio climático. Todos son eslabones de una misma cadena, la del medio ambiente, que requiere de una respuesta de todas las administraciones. Por parte de la Xunta, la conselleira del ramo, Beatriz Mato, recordó que «la descarbonización, la reducción de gases de efecto invernadero y el incremento de las energías renovables», seguirán siendo objetivos irrenunciables para frenar los perjuicios del calentamiento global.