La Xunta amenaza con sanciones contundentes a las navieras de Cíes
Miles de personas se han quedado en los últimos días sin poder aceder a las islas pese a haber comprado el billete
El caos volvió ayer a apoderarse de la Estación Marítima de Vigo. En los últimos días miles de personas se han quedado en tierra o se les ha negado desembarcar en las Islas Cíes. Las cuatro navieras que realizan el transporte de viajeros al archipiélago habían vendido más billetes que el cupo de 2.200 visitantes diarios (a los que se suman las 800 plazas del cámping) que se ha establecido como máximo diario para visitar el parque nacional. El domingo tuvo que intervenir por primera vez la Guardia Civil impidiendo el acceso a las islas y ayer la Xunta anunció que impondrá sanciones contundentes contra las navieras.
«Ante la reincidencia y reiteración de las infracciones cometidas por las navieras, la Consellería de Medio Ambiente va a aplicar el régimen sancionador con toda su dureza y hasta sus ultimas consecuencias», afirmó ayer en Vigo, la directora xeral de Patrimonio Natural, Ana Díaz, según informa Efe. Las multas a las que se enfrentan oscilan entre los 3.000 y los 200.000 euros. No es la primera vez que las compañías que tienen la concesión del transporte a las Cíes sobrepasan el cupo. Entre el verano pasado y este acumulan ya once expedientes sancionadores por este motivo. Según informó ayer la Consellería de Medio Ambiente, si se le suman otros incumplimientos (horarios, falta de información por megafonía..) el total de expedientes llega a los 40. Por los cinco expedientes de 2016, la Xunta propone una sanción conjunta de 30.000 euros. Sólo el pasado domingo, entre las cuatro navieras, pusieron a la venta más de 2.000 billetes por encima de lo permitido, con lo que habrían facturado unos 36.000 euros en una jornada.
La única compañía que por el momento ha ofrecido explicaciones públicas de lo sucedido ha sido Mar de Ons. El domingo emitía un comunicado en el que aseguraba estar atendiendo a los pasajeros afectados y responsabilizaba a la Xunta —que tiene las competencias de gestión del parque nacional— de lo sucedido . «Naviera Mar de Ons quiere aguardar a conocer las motivaciones que hayan podido inclinar a la dirección del Parque a tomar una decisión que ha perjudicado a los viajeros y en última instancia a la imagen del Parque Nacional», afirmaba la compañía.
En conversación con ABC, una trabajadora de otra naviera achacó la sobreventa a los fallos de la aplicación informática que gestiona el cupo de visitantes permitidos.
Malestar de los pasajeros
En la mañana de ayer volvían a vivirse momentos de tensión entre los afectados y los empleados de las navieras. Según informó ayer Ep, los primeros denunciaron que «en ningún momento» les habían puesto sobre aviso de que podrían quedarse en tierra por haberse superado el cupo de visitantes a estas islas del Parque Nacional Illas Atlánticas. Los pasajeros explicaron que compañías como Mar de Ons o Piratas de Nabia les ofrecían como alternativa, viajar a Ons , o bien la devolución del importe de los pasajes.
«Venimos de Caldas de Reis, hemos pagado peajes, gasto de gasolina, y ahora llegamos y nos ofrecen ir a Ons, cuando nosotros vinimos para ir a las Cíes», lamentó un grupo de afectados. Otros se planteaban interponer acciones legales. Era el caso de dos abogados madrileños, que sacaron su billete ‘on line’ el pasado 8 de agosto y lo recogieron en las taquillas el pasado viernes, «sin que nadie avisara de que esto podría pasar». Ayer explicaron que estudiarán presentar una denuncia en los juzgados «por si la empresa incurrió en una estafa».
A la polémica se sumó también el acalde de Vigo, Abel Caballero. El regidor socialista culpó a la Xunta de lo sucedido. Según informa Efe, Caballero censuró que las compañías vendiesen billetes «por encima» de lo establecido, pero también criticó la actuación «catastrófica» de la Xunta «porque no ejerció su obligación, que es controlar que no se produzca una venta excesiva». Además consideró una «catástrofe» que se dejase «a miles de personas en medio de la ría embarcados» cuando se detectó la sobreventa. Fue, aseguró el regidor vigués, «la peor campaña que se podía hacer de las islas Cíes» en su camino a Patrimonio de la Humanidad.
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