Javier Guerra - Senador del PP

En España hay una democracia plena pero no un Gobierno sensato

Vivimos en un Estado plenamente democrático, en el que la voluntad de las personas se refleja en unas cámaras de representación en las que unos soportan al Gobierno y otros ejercemos de oposición. Si, vivimos en un Estado plenamente democrático, pero con un Gobierno que debería adoptar sus decisiones de una forma colegiada y no lo hace porque parece no haber entendido su papel. El Gobierno es uno, y en su seno no existe la función de oposición. ¿Se refería a eso Pablo Iglesias cuando tiene la desvergüenza de afirmar que en España no hay una situación de plena normalidad democrática? Evidentemente, no.

Vivimos en una democracia que, como tal, tiene sus mecanismos de contrapeso y control (como el poder judicial) aunque es verdad que el Sr. Iglesias los quiere controlar y someter.

La democracia española es PLENA. No existe la democracia ‘parcial’. Es o no es. Sin embargo, incluso en una democracia saludable puede haber un Gobierno que no sea ni pleno ni saludable como, desgraciadamente, sentimos en España.

Una democracia lo puede juzgar todo menos a sí misma. Y es peligrosísimo que alguien la juzgue directamente como ha hecho Iglesias, porque son esas las actitudes que conducen a las tiranías, a las que, probablemente, este señor tome como guía de su «pensamiento» político. Y , por cierto, el ejercicio de la democracia no significa la vara de medir que los comunistas aplican según sus intereses , sino una única medida en la todos tenemos los mismos derechos pero , también , las mismas obligaciones (por ejemplo no se puede aplicar la libertad de expresión según le guste o no a D. Pablo )

La democracia (ciudadanos, cámaras y jueces) juzga gobiernos, juzga actuaciones, juzga decisiones, pero no se juzga a sí misma. Lo que significa democracia es que, si existe algún aspecto discutible y susceptible de ser cambiado, el propio sistema proporciona los mecanismos para discutirlo y, en su caso, cambiarlo. Y eso existe en España. Pese a que no le guste a Iglesias. Donde no existe es en las dictaduras comunistas y bolivarianas . Ahí no hay más que pobreza y falta de libertad

Cualquier manifestación como la de «Pablo» es, de hecho, una enmienda a la totalidad. Lo que ha dicho Iglesias –nada menos que un vicepresidente designado por los mecanismos democráticos de España– es que en España no hay democracia . La reducción al absurdo establecería que, entonces, Iglesias no es vicepresidente. Como argumento jurídico, la reducción al absurdo refuta un razonamiento no por ser descabellado, sino porque implica una conclusión ilógica y absurda que, en una primera lectura, no es tan evidente. Vamos..., una trampa en la que Iglesias ha caído al decir esas palabras. Y que sus «socios» de gobierno sitúan en el contexto de «una campaña electoral». Así, sin más. Vivir para ver.

Otra cosa es que no nos gusten decisiones que se adoptan con esos mecanismos. O incluso se podría dar el caso de que esas decisiones se hayan adoptado sin respetar esos mecanismos. Para eso tenemos parlamentos, juzgados y un Tribunal Constitucional. Incluso estamos sometidos a una supervisión supra-nacional, la Unión Europea, con sus propios mecanismos de control, juicio y verificación democrática .

Sí, Pablo, sí. En España tenemos una democracia plena pero, por lo que se ve, tenemos unos políticos que no saben entender la democracia. Y esto da que pensar. Quizás la realidad pura y dura es que no les gusta la democracia . Y como eso es así, la mínima coherencia debería hacer que te fueras. Pero estas cómodo así, con niñera .

Y los delincuentes a la cárcel.

Javier Guerra es senador del PP.

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