Abel Losada recuerda a Leiceaga el «poder municipal» del PSdeG en Pontevedra

No hay tregua. Los socialistas del Sur siguen con su hoja de ruta y no van a dejar de exigir sus reivindicaciones y su «peso político» en la federación gallega del PSOE. Ayer fue el turno del candidato número uno por Pontevedra y estrecho colaborador de Abel Caballero, Abel Losada, quien recordó al candidato a la presidencia de la Xunta, Xoaquín Fernández Leiceaga, los signos distintivos del socialismo español y gallego: municipalismo y federalismo. Además, aprovechó la presentación de la candidatura provincial en la Alameda pontevedresa para cuantificar el poder institucional del PSdeG en el territorio. Losada, con voz firme y maneras de profesor, le recordó al candidato que «dos de cada tres pontevedreses están gobernados por socialistas».

Añadió que el PSdeG tiene 17 alcaldes, 9 regidores sostenidos con la ayuda de otros partidos y «por primera vez desde el final de la dictadura franquista, la Diputación». Y la conclusión fue inmediata: «El organismo provincial y los concellos son claves para avanzar en las autonómicas».

El torrente de datos sobre el «peso» de la agrupación socialista de Pontevedra, y en particular la municipal de Vigo, se produce tras la purga realizada en las listas aprobadas por el Comité Provincial y tras los desaires recibidos por el alcalde de Vigo y «la mayoría de los militantes pontevedreses», afirmaron fuentes socialistas. La intención de los críticos es recordar el empeño puesto «durante mucho tiempo para conseguir la representación que el PSOE tiene en este momento» y contraponerlo al desdén con el que «la dirección y el candidato tratan a los cargos públicos del partido». De hecho, no es casual que a escasos metros de la Diputación se celebrase un acto que no contó con la asistencia de la presidenta Carmela Silva. Entre los invitados solo estaba el senador Modesto Pose, que se escondía del sol detrás de una columna, el secretario xeral de las Xuventudes Socialistas, Aitor Bouza, quién opta por un perfil más discreto; y el portavoz del PSOE en la ciudad del Lérez, Agustín Fernández.

La lección impartida por el candidato Losada no se ciñó a una enumeración contable de los resultados conseguidos en su circunscripción en las pasadas elecciones. Losada fue más allá. El veterano militante recordó de forma intencionada las palabras del coordinador del programa cultural, Antón Louro, en las que definió a Galicia como «una nación cultural» y reivindicó más autonomía para el PSdeG: «Se trata de reforzar nuestra voluntad de conseguir un proyecto autónomo dentro del PSOE».

Tras la intervención de Abel Losada fue el turno del candidato a la presidencia de la Xunta, Xoaquín Fernández Leiceaga. El aspirante evitó referirse a Pontevedra y a los alcaldes y se centró en su proyecto para «construir una alternativa a Núñez Feijóo». Leiceaga trabaja con la idea de que «cada vez la gente hablará menos de Caballero y de la crisis interna», según explicaron fuentes socialistas.

Su presencia en Pontevedra se ciñó a lo previsto y evitó contestar a los medios de comunicación «porque ya estuvo por la mañana en Vigo». De hecho, el propio candidato aseguró en relación a la crisis interna y al malestar que el alcalde Abel Caballero trasladó a la Comisión Ejecutiva Federal por los cambios en la candidatura de Pontevedra, que los socialistas tienen por delante «una tarea de enorme trascendencia», que es «derrotar a Feijóo y construir una alternativa de progreso y modernización». «A eso dedicaré todas mis fuerzas y desvelos. Eso es lo que me preocupa», subrayó.

Sánchez, con el candidato

En su visita a Vigo por la mañana volvió a estar sin el alcalde y su equipo volvió a normalizar esta ausencia sin dedicarle más comentarios que «estuvo el cabeza de lista, que es de la ciudad». Por el contrario, el candidato sí contará con el respaldo del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, el próximo sábado en Oroso.

Los socialistas fletarán autobuses desde todos los puntos de Galicia para participar en la décima fiesta del PSdeG. Se prevén importantes ausencias, aunque se ha dirigido una instrucción a las ejecutivas provinciales para que se suspendan todos los actos para favorecer la asistencia.