El alcalde de Alicante necesita a Ciudadanos y el PP si rompe el tripartito, como el PSOE en Madrid

Las riendas del Ayuntamiento de Alicante están tensas y quienes las conducen no ocultan las desavenencias entre los socialistas y Guanyar Alacant (marca Podemos), pero parecen darse un compás de espera y tienen su atención puesta en lo que ocurre en Madrid, donde la correlación de fuerzas es similar y no hay aún un pacto claro.

El tercer en discordia del tripartito alicantino, Compromís, solo acepta seguir en una coalición de izquierdas y no se quedará junto al alcalde, Gabriel Echávarri (PSOE), si este intenta la operación de apoyarse en Ciudadanos. De forma análoga a las negociaciones por llegar a Moncloa, el socialista tendría que sumar entonces a los populares si quiere gobernar con mayoría suficiente. En el caso del alicantino, no tiene que superar la investidura, a diferencia de su líder, Pedro Sánchez, y parece imposible que Echávarri quede apeado por una moción de censura porque ni los nacionalistas ni la marca local de Pablo Iglesias -juntos en Madrid- darían sus votos a la derecha.

Por ahora, todos se miran y nadie se posiciona con determinación. El alcalde ha asumido el órdago que su Ejecutiva Municipal lanzó este lunes a Miguel Ángel Pavón instándole a «dimitir» por «coherencia» y reprochándole estar en el equipo de gobierno «por el cargo y el sueldo», un ataque nítido que, no obstante, horas después no considera un «ultimátum».

Pavón, por su parte, ha reaccionado con sangre fría e indiferencia a este mensaje. «Me da igual», ha declarado, además de dejar claro que no piensa dejar el equipo de gobierno y de devolver la pelota al tejado de los socialitas, ya que apuestan ahora por la libertad de apertura de comercios en domingos y festivos, « una propuesta del PP» y una de las «líneas rojas» del pacto de gobierno de izquierdas, según Pavón.

«Crisis» por indiscreción

Entre ambos, Natxo Bellido (Compromís) se mantiene equidistante y ve culpables a ambas partes en esta «crisis» por canalizar sus diferencias a través de los medios de comunicación.

El portavoz de Ciudadanos, José Luis Cifuentes, ve todavía lejano un acercamiento al alcalde, aunque en este clima de «desgobierno» en la ciudad no descarta nada. Si diera ese paso, la última palabra la tendría el PP, la lista más votada, y a priori desde Génova darían su aprobación, toda vez que en Madrid también se han mostrado a esa triple alianza entre socialistas, populares y el partido de Albert Rivera. No obstante, para Moncloa la fórmula pasaba porque Mariano Rajoy coja la batuta.

Tras las elecciones municipales, la candidata Asunción Sánchez Zaplana ofreció esa opción, resta por saber si el nuevo portavoz, Luis Barcala, piensa lo mismo.