El emotivo gesto del padre de la menor fallecida en Mislata: «Quería que la sonrisa de mi niña diera la vuelta al mundo»

A. Caparrós / D. Maroto

12/01/2022
Actualizado a las 19:36h.

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«Quería que la sonrisa de mi niña diera la vuelta al mundo». Así se expresa Iván Pérez, padre de Vera , la pequeña de cuatro años fallecida como consecuencia del accidente registrado el pasado 4 de enero en un castillo hinchable de feria de atracciones de la localidad valenciana de Mislata.

Este martes, el progenitor de Vera difundió un mensaje en la red social Twitter con el que ha cumplido su propósito. Iván Pérez publicó un vídeo de su hija en el que cantaba un villancico a modo de homenaje que suma cientos de miles de visualizaciones y que ha canalizado los mensajes de condolencia hacia la familia.

«Tengo cuatro años y me despido del mundo de forma trágica e injusta. Gracias por la fuerza que me habéis dado y el cariño a mis papás y tetes. Y a los cinco amiguitos a los que ayudo a vivir con mis órganos, sed tan felices como he sido yo. Os dejo mi sonrisa para que no desaparezca. VERA» .

En el emotivo mensaje en nombre de la pequeña, la familia de la menor anunciaba un gesto de solidaridad especialmente conmovedor. Los órganos de Vera servirán para que otros niños puedan recibir un trasplante que les permita sobrevivir.

Es el legado y el recuerdo, que junto a su sonrisa, deja una de las dos menores fallecidas en el trágico sinestro de la feria de Mislata el pasado 4 de enero . La familia de Cayetana , la otra niña de ocho años que murió como consencuencia de las heridas que sufrió el salir despedida del castillo hinchable, anunció la pasada semana su determinación de emprender acciones legales con el fin de que se depuren las responsabilidades del siniestro .

Conforme ha informado ABC , la investigación abierta por la Policía Nacional sigue abierta y todavía no se ha entregado el atestado al Juzgado de Instrucción número 4 de Mislata, que se encontraba de guardia el día que se produjeron los hechos.

La Policía Nacional no ha hallado en un primer momento anomalías que pudieran suponer consecuencias de carácter penal ( un doble delito de homicidio imprudente ), pero sigue con las pesquisas a la espera de informes periciales sobre el viento que soplaba aquella tarde, tras haber interrogado tanto al dueño de la atracción como a los dos ingenieros (el técnico municipal y el contratado por la empresa del castillo hinchable) que certificaron la instalación.

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