Imagen de archivo de Mónica Oltra y Ximo Puig
Imagen de archivo de Mónica Oltra y Ximo Puig - ROBER SOLSONA
ELECCIONES GENERALES

El «acuerdo valenciano» busca voltear la mayoría del PP y amarrar los dos senadores del PSPV

Ximo Puig teme que la suma de Podemos, Compromís y EU les deje sin representantes en la Cámara Alta

VALENCIA Actualizado: Guardar
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Bajo la premisa dictada por la líder de Compromís, Mónica Oltra, de que «cada voto de la izquierda cuente», el «Acuerdo Valenciano» que promueven los nacionalistas para concurrir al Senado junto al PSOE, Podemos e Izquierda Unida busca voltear la mayoría que obtuvo el Partido Popular en las elecciones del 20 de diciembre. Entonces, los populares cosecharon nueve senadores con el 33% de los votos. El PSPV obtuvo dos asientos en la Cámara Alta con el 21,3% de los apoyos.

Mientras, la coalición de Compromís y Podemos le superó en porcentaje (24,11%), pero solo sacó un representante. Si, conforme defiende Ferraz, los socialistas concurren en solitario, la suma de Podemos, Compromís y Esquerra Unida podría dejar sin representación al PSPV en Alicante y Castellón, siempre que se repitieran de forma exacta los resultados del pasado 20 de diciembre.

Entonces, los socialistas no lograron que su candidato a la Cámara Alta por Valencia, Jorge Alarte, lograra un escaño.

El objetivo de la unión pasa por acabar con la mayoría del PP en la Cámara Alta y trasladar al Senado el «problema valenciano» con el argumento de la reclamación de una nueva financiación autonómica, aunque ayer se suspendió sine die la reunión convocada por Podemos para abordar el posible acuerdo con Compromís y los socialistas, que pasa por replicar en la papeleta el pacto que sustenta al Gobierno de Ximo Puig.

Los socialistas, además, persiguen con el acuerdo quedarse sin representación en el Senado, por lo que abogan por la coalición o, como alternativa, pactar el número de candidatos que presenta cada partido, con un acuerdo «claro y firmado de compartir ese espacio», para lo cual se dispondría de más plazo para un acuerdo, ya que las listas se pueden presentar del 18 al 23 de mayo. Así, se enviaría un mismo mailing con tres nombres marcados, uno por cada partido.

Fuentes socialistas consideran que esta fórmula no es más que «un intento de burlar la coalición» y recordaron que, en última instancia, el registro de candidaturas es potestad del Comité Federal del PSOE, que lo tumbará este sábado si Ximo Puig se decide a llevarlo.

La vicepresidenta, Mónica Oltra, atribuyó la cancelación de la cita a un problema para «cuadrar las agendas».

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