Junts planteará a sus bases si seguir en el Govern con ERC
«Después de cinco años en que se ha dado una oportunidad sincera al diálogo, es hora de retomar el hilo del 1 de octubre y de la culminación de la independencia», apunta la nueva ponencia de la formación
Junts, entre el futuro imposible y el pasado que no existe
Nueva dirección pero mismas amenazas a sus socios de gobierno. El borrador de la nueva ponencia política de Junts, cuyas bases deben debatir y votar en poco más de un mes, propone, entre otras medidas, que el 1 de octubre de este año se convierta, coincidiendo con el quinto aniversario del referéndum ilegal , en un «punto de inflexión» para retomar el camino a la independencia y analizar con las bases de la formación si hay que romper con ERC al frente de la Generalitat, un nuevo desafío a los republicanos.
Su nueva hoja de ruta habla en concreto de valorar en qué grado se está cumpliendo el acuerdo de gobierno entre Junts y ERC y tras el que el republicano Pere Aragonès resulto investido presidente, y evaluar qué medidas hay que tomar para conseguir que sus intenciones se cumplan, sin descartar ninguna: «Junts planteará a sus bases la posibilidad de seguir o no en el Govern o tomar otro tipo de iniciativas adecuadas a la situación», apunta el texto.
«Después de cinco años en que se ha dado una oportunidad sincera al diálogo, es hora de retomar el hilo del 1 de octubre y de la culminación de la independencia», añade el documento. Para ello, la nueva dirección del partido , que encabeza Laura Borràs y Jordi Turull, abogan por trabajar para constituir »lo antes posible» el espacio de coordinación estratégica que prevé el acuerdo de gobierno firmado con ERC y que tendría que concretar los próximos pasos en el camino a la independencia.
En este sentido, apuestan porque la acción legislativa del Govern suponga «a todos los niveles institucionales un avance verificable » en el proceso de la independencia y por ello apuestan por proponer resoluciones para que a nivel de departamentos, la Generalitat vaya avanzando hacia «la desconexión económica y política» de Cataluña.
"Una revuelta democrática como la de 2017"
Además, la hoja de ruta habla de llevar a cabo «una revuelta democrática como la que ya empezamos a vivir en otoño de 2017» y Junts también cree que hay que trabajar con la estrategia de la confrontación, que contemple «la desobediencia civil y la no cooperación de manera democrática». Todo ello para forzar a una negociación que tenga como objetivo un eventual referéndum acordado o, directamente, una independencia ya sea por la vía unilateral o negociada.
La ponencia también es especialmente crítica con la mesa de diálogo, de la que Junts se desmarcó hace meses y cuyos nuevos líderes creen que ha sido «contraproducente y no ha cumplido con las directrices marcadas» por el Parlamento de Cataluña.
