Mossos más visibles en el Raval para disuadir a los delincuentes
La policía catalana estrena este jueves un nuevo dispositivo, en la misma semana del gran golpe a los narcopisos
Ya que no podrán contar con más efectivos, al menos a corto plazo, el intento de los Mossos d’Esquadra para atajar la exponencial delincuencia que asedia el casco antiguo de Barcelona pasará por que los agentes «de uniforme» sean más visibles en los barrios «más calientes» de la ciudad . Es la principal medida del nuevo dispositivo que ha estrenado este jueves la policía catalana, justo la semana en que los Mossos han protagonizado el gran golpe al tráfico de drogas en los «narcopisos» del Raval.
Los Mossos d’Esquadra lo ha bautizado como el plan Ubiq y se centrará en barrios especialmente sensibles como el Gòtic y, muy especialmente, el Raval. El coordinador del plan, un mando de la comisaría de Ciutat Vella, elegirá las zonas «sensibles y conflictivas» concretas en que se desplegarán estos efectivos durante un tiempo. Luego, se movilizarán hacia otras, y así sucesivamente.
Cada día se desplazará en estas áreas una furgoneta con seis antidisturbios de la unidad Arro. Aparcarán y patrullarán a pie en binomios, junto a los agentes de proximidad. Su objetivo será el de identificar a posibles traficantes y carteristas pero también dar una sensación de más seguridad a vecinos y carteristas, según fuentes policiales.
También peinarán estas zonas agentes en moto, que circularán en trinomio . La presencia del efectivos del grupo regional de motos, además de su labor disuasoria, será imprescindible para actuar con rapidez cuando la situación así lo requiera. Se facilitará así la persecución de ladrones, traficantes o agresores de ser necesario. Por las laberínticas y estrechas calles del Raval, a priori parece la forma más rápida y efectiva de desplazarse.
Todo ello se complementa con la labor de los agentes de proximidad, que se encargarán de informar a vecinos y comerciantes sobre las distintas actuaciones policiales, que se llevarán a cabo en las próximas semanas. Se ocuparán también de intensificar las relaciones con el tejido vecinal y los comerciantes , un colectivo especialmente preocupado por la degradación que el casco antiguo ha sufrido en los últimos meses con la proliferación de traficantes, ladrones, agresiones y heroinómanos vagando por las calles.
La Generalitat intentará que este nuevo plan tenga un mayor impacto que el iniciado este verano . El distrito de Ciutat Vella se reforzó hace pocos meses con una cincuentena de agentes y se aumentaron las horas extras de los mossos que ya patrullaban por sus calles. El proyecto no logró poner coto al crecimiento de la delincuencia en el casco antiguo.
A seis meses de las urnas
Hacía tiempo que la alcaldesa, Ada Colau, reclamaba a a la Consejería de Interior de la Generalitat una mayor presencia policial en los barrios del casco antiguo. Al margen del impacto que para vecinos y comerciantes acarrea el alarmante crecimiento de la delincuencia en estas zonas, Colau es consciente también de que sus posibilidades para repetir victoria en las elecciones municipales de la próxima primavera pueden pasar, en buena parte, por el balance de su mandato en materia de seguridad .
El nuevo plan llega justo la semana en que los Mossos, dirigidos por un juzgado barcelonés, han protagonizado el m ayor operativo llevado a cabo hasta el momento contra el tráfico de drogas en los «narcopisos». Más de 50 supuestos traficantes dominicanos fueron detenidos en una operación en la que los agentes irrumpieron en una cuarentena de inmuebles. La cúpula de la trama ya duerme entre rejas.
