En su primera sesión de control en el Parlament, el nuevo consejero de Educación de la Generalitat, Josep Gonzàlez-Cambray , que sustituye a Josep Bargalló al frente del departamento, ha defendido con vehemencia el sistema de inmersión lingüística , negando que sea discriminatorio, y ha dejado claro que seguirá la estela de su antecesor en su particular cruzada contra la escuela concertada.
En respuesta a una pregunta de la diputada del PP, Lorena Roldán sobre el modelo lingüístico vigente en la escuela catalana, el consejero ha negado con contundencia que Cataluña tenga «un problema de inmersión lingüística» y ha replicado a Roldán que por mucho que repita una mentira no será verdad.
En la Cámara catalana, el consejero ha indicado a la diputada popular que «parte de una premisa falsa» . En la misma línea ha respondido a otra pregunta del diputado de Cs, Nacho Martín Blanco , a quien ha negado también que el actual sistema de lenguas en la enseñanza sea discriminatorio. «En Cataluña no se hace ningún tipo de discriminación. Querrían que la hiciésemos, pero no la haremos», le ha dicho.
Martín Blanco también le ha acusado de tener una «actitud anticruzada» contra la enseñanza concertada , a lo que Gonzàlez-Cambray ha respondido que las escuelas concertadas forman parte del sistema educativo pero que el Govern no permitirá ningún tipo de discriminación por cualquier motivo.
« No permitiremos que haya escuelas que segreguen con dinero público. Defenderemos que todas las escuelas financiadas con fondos públicos tengan la misma función social», ha subrayado el consejero.
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