Cultura
La Unidad de Emergencias del Patrimonio Cultural suma más de una decena de intervenciones desde 2016
En el marco de Ar&Pa, que se inaugura este jueves, realizará un simulacro de actuación para la estabilización de estructuras históricas
Tras el terremoto de Lorca, (Murcia) en 2011 el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte veía la necesidad de contar con un Plan Nacional de Emergencias y Gestión de Riesgos en el Patrimonio Cultural. A la par comenzaban también a trabajar las autonomías y Castilla y León ponía en marcha su propia Unidad consciente de la necesidad de aplicar unas líneas de trabajo, acciones y soluciones que garanticen la salvaguarda de nuestro patrimonio cultural ante catástrofes y otras circunstancias destructivas.
En estos dos años de funcionamiento, la Unidad de Riesgos y Emergencias en Patrimonio Cultural ha sumado más de una decena de actuaciones entre programas de prevención y las propias intervenciones con motivos de incendios e inundaciones, además de haber participado en tres encuentros internacionales sobre esta materia, según datos facilitados a ABC por la Consejería de Cultura y Turismo.
Respecto a los programas de prevención con el objetivo de minimizar los daños en caso de catástrofe, la Unidad está trabajando actualmente en sitios de especial relevancia como la estación rupestre de Siega Verde. Con el fin de evitar los incendios forestales en la zona, el mayor riesgo al que está expuesto, se han intensificado de mano de esta Unidad las campañas de desbroce y limpieza, lo que ha permitió que las llamas llegaran el pasado mes de marzo a esta zona Patrimonio de la Humanidad.
La Unidad también ha trabajado, en este sentido, en la elaboración de la Guía de prevención de incendios para edificios de interés patrimonial en Castilla y León y actualmente está desarrollando un plan de salvaguarda en la Iglesia-Museo de Oncala, en colaboración con el Servicio Territorial de Cultura de Soria.
Incendios
En cuanto a incendios se refiere, su actuación se enmarca fundamentalmente en 2017, un año marcado por grandes incendios. Según datos facilitados por la Consejería de Cultura y Turismo, la Unidad articuló aquel año un protocolo especial para Las Médulas, donde puso a disposición de los servicios de extinción un técnico de patrimonio para evitar, en lo posible, daños en evidencias arqueológicas. También intervino en los incendios de Pino del Oro, en Zamora, y en los declarados en los castros del Berrueco en Salamanca y Ávila, «en los cuales, tras un análisis in sito de los problemas, se estableció la necesidad de desplazar empresas especializadas, para una valoración pormenorizada de las necesidades creadas tras el fuego o la recuperación de evidencias arqueológicas que quedaban a la vista», evitando así un expolio.
Estudio de riesgo de inundaciones
Respecto a las inundaciones, la reciente sufrida por el Monasterio Cisterciense de Santa María de Huerta, en Soria, ha llevado a la Unidad a impulsar vinculado a la investigación científica un Estudio del Riesgo de Inundaciones en el entorno del Monasterio con el fin de analizar el riesgo, delimitar los elementos patrimoniales expuestos y diseñar medidas correctivas.
Por lo que se refiere a la colaboración internacional, esta Unidad castellano y leonesa ha participado del I encuentro Luso-Español de emergencias en patrimonio cultural, y a finales de este mismo noviembre participará en otro a nivel europeo en Roma. Además, la Junta participa en el proyecto europeo «Cultura cannot wait», junto a Italia, Francia y Turquía. Asimismo, la Unidad ha participado en sendos simulacros junto a la Unidad Militar de Emergencias en Cantabria en 2017 y en Murcia en 2018. El próximo será en el marco de Ar&Pa, también junto a la UME, y como sede el Monasterio de Nuestra Señora del Prado. En esta ocasión esta Unidad realizará un simulacro de actuación para la estabilización de estructuras históricas.
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