La secretaria de Organización del Partido Socialista de Castilla y León, Ana Sánchez
La secretaria de Organización del Partido Socialista de Castilla y León, Ana Sánchez - HERAS
Política

Un tuit de Ana Sánchez con un encapuchado prende de nuevo la crisis interna en el PSCL

Se declara en «rebeldía» porque «la injusticia se ha convertido en ley»

Valladolid Actualizado: Guardar
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La crisis interna que vive el Partido Socialista de Castilla y León parece no tener vuelta atrás. El cisma entre un sector crítico cada vez más mayoritario y el aparato oficial es tan evidente que a día de hoy es más que improbable que surja cualquier punto de entendimiento. La mecha que incendió de nuevo a la formación ayer fue un mensaje lanzado a las redes sociales por la número 2 de Luis Tudanca. Ana Sánchez publicaba en twitter y en facebook una imagen más que llamativa en la que, junto a una frase célebre del expresidente de Estados Unidos, Thomas Jefferson («Cuando la injusticia se hace ley, la rebeldía se hace obligación»), aparecía un encapuchado a punto de lanzar un objeto similar a una piedra.

En medio de la situación traumática del partido a nivel nacional tras la dimisión de Pedro Sánchez, se podía pensar que era una diatriba dirigida a los militantes socialistas para que se movilicen contra quienes parecen controlar ahora el PSOE -la zamorana negó este extremo posteriormente- y así lo entendieron varios de los barones provinciales y dirigentes más significativos del PSCL, quienes llegaron a acusar a la secretaria de Organización de «incitar a la violencia» con una comunicación que consideraron «inaceptable» y sobre la que exigen explicaciones que la también vicepresidenta de las Cortes de Castilla y León considera que no tiene que dar.

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A lo largo de la mañana, la zamorana volvió a utilizar las redes sociales para vincular su controvertido mensaje con las casos de «corrupción organizada» del Partido Popular y afirmar que ella se declara «en rebeldía» por ello.

«Iconos de la libertad»

Consciente del malestar creado por el dibujo del encapuchado -que califica de «icono de la libertad» al considerar que es una obra de Bansky (que sí es autor de una pieza similar en la que se lanza claramente un ramo de flores)-, ya por la tarde volvió a defenderse de las críticas sin ningún tipo de arrepentimiento al destacar su «sorpresa» porque una frase de Jefferson «pueda causar revuelo», al tiempo que se limita a señalar que «las flores o las piedras están en los ojos del que mira».

En todo caso, para entonces el enfado ya era imparable y mayúsculo entre varios de los pesos pesados del partido, aunque sólo la socialista leonesa Manuela Murías llegó a pedir su dimisión también en las redes sociales. Mientras, la presidente del Partido Socialista de Castilla y León -a la que podrían cesar en la próxima Comisión Ejecutiva del PSCL por votar contra los postulados de Pedro Sánchez en el pasado Comité Federal-, consideró ayer «inaceptable» el comentario de la secretaria de Organización y pidió a Tudanca que «tome cartas en esta lamentable situación e impida que actuaciones reprobables como ésta se realicen». Por ello, reclamó la convocatoria de un Consejo Territorial en el que se estudie lo sucedido.

«Esos comentarios me hacen daño como socialista», dice Míriam Andrés

También solicitó la reunión de este órgano la secretaria provincial del PSOE de Palencia, Miriam Andrés, quien afirmó que «no se puede transmitir como partido una imagen de incitación de la violencia y la radicalidad porque el electorado no nos lo va a perdonar». En su opinión, la imagen trasladada por Sánchez «me recuerda a la de la CUP catalana, donde se llama a la rebeldía continua» y esos comentarios «me hacen daño como socialista».

Desde Salamanca, Fernando Pablos aseguró que el mensaje de la zamorana «supera con amplitud lo que son los límites de la prudencia» sobre todo cuando «esta persona es también vicepresidenta de las Cortes» y consideró que la imagen del encapuchado «podría ser perfectamente de la ‘kale borroka’ cuando muchos de nuestros compañeros la sufrieron en sus propias carnes».

Fernando Pablos aseguró que el mensaje de la zamorana «supera con amplitud lo que son los límites de la prudencia»

Para el también procurador, es el secretario general del PSCL el que «tiene que tomar una decisión y considerar si ha sido o no un acto responsable. Cuando él se pronuncie, yo haré mi valoración».

En opinión del secretario provincial del PSOE de León, Celestino Rodríguez, este caso «merece una explicación muy clara y en función de la misma los órganos competentes deberán tomar una decisión, bien sea en la Ejecutiva Autonómica o en el Consejo Territorial», aunque «a priori parece que se incita a la violencia».

«Que lo retire»

El PSOE de Segovia también fue contundente al destacar «lo desafortunado del comentario», al tiempo que animó a Ana Sánchez «a retirarlo y que se abstenga de lanzar este tipo de mensajes». «Es como si estuviera incitando a hacer algo a los ciudadanos cuando estamos en un país que tiene normas que hay que animar a cumplir en lugar de hacer lo contrario; más aún cuando ocupas el cargo de secretaria de Organización y vicepresidenta de las Cortes en un partido como el PSOE», trasladó Alberto Serna, secretario de Acción Electoral de los socialistas segovianos, quien recordó que «los que tenemos un puesto debemos tragar saliva, ser más pacientes y templados».

Sánchez, por su parte, dijo sentirse «estupefacta» por la interpretación de «algunos» por utilizar «dos iconos de la libertad» y dijo desconocer «por qué se dan por aludidos». Mientras, Tudanca se limitó a señalar también en twittter su impresión de que «no creo que Thomas Jefferson fuera un violento radical».

El mensaje de la también vicepresidenta de las Cortes, que no explica los motivos del mismo, señala que «cuando la injusticia se convierte en ley, la rebelión se convierte en deber». Posteriormente, la número 2 del secretario regional, Luis Tudanca, se reafirma en este mensaje vinculándolo a los casos de corrupción del PP al preguntarse «si es o no necesario levantar la voz». Ella misma se responde asegurando que ante «una estructura corruptamente organizada, sí, me declaro en rebeldía».

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