Militares exigen «incentivos» por ir a Monte la Reina «para repoblar»

AUME avisa de que podrían recurrir judicialmente si hay traslados forzosos al cuartel zamorano

La Asociación Unificada de Militares Españoles informa sobre la incidencia del proyecto de Monte la Reina en los miembros de las Fuerzas Armadas ICAL

Alberto Ferreras

El proyecto para la reapertura militar de Monte la Reina, que ha concitado la unanimidad entre instituciones y partidos políticos de Castilla y León, encuentra su primer «enemigo» en los propios profesionales del Ejército que tendrán que trasladarse a las instalaciones zamoranas. La Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME) mostró ayer su rechazo a cómo se gestiona el nuevo emplazamiento, ya que consideran que a los afectados no se les ha informado de nada y se les trasladará al nuevo cuartel zamorano no por interés estratégico del Ejército sino como objeto «de repoblación». AUME quiso dejar claro que su rechazo no es contra el proyecto en sí, sino contra la la negativa del Ministerio de Defensa a negociar las condiciones de los traslados para que sean lo menos lesivas posibles para los militares. Al respecto, su secretario de Comunicación, Jorge Bravo, pidió en rueda de prensa en Zamora que se ofrezcan «incentivos» a los militares que tengan que trasladarse al nuevo cuartel que se ubicará en el antiguo campamento militar del municipio zamorano de Toro. La asociación, que cuenta con 4.000 asociados de los cerca de 127.000 integrantes del Ejército, lamentó que en la asignación de una unidad de artillería y otra de zapadores a Monte la Reina no se utilicen criterios de estrategia militar sino que esa ubicación responda únicamente a una cuestión demográfica y al interés en «repoblar» Zamora, lo que «cosifica» a los militares.

El traslado forzoso a ese emplazamiento, al no estar justificado por criterios estrictamente militares, es recurrible en la vía judicial, hasta la que piensa llegar AUME si no se ofrecen compensaciones que permitan que haya «cierta voluntariedad» en el traslado y que se garantice la satisfacción de «primeras necesidades básicas» a los trasladados, como el acceso a la vivienda, servicios educativos y facilidades laborales a los familiares de los desplazados. AUME admitió que los traslados de destino son relativamente habituales entre los militares sin que estos se puedan oponer, pero defienden que en otros casos están justificados por razones operativas, algo que, según afirmaron, no se da en Monte la Reina, al considerar que incluso va en contra de la política de Defensa de los últimos años tendente a la reagrupación de unidades militares. AUME solicitó al Ministerio de Defensa que se siente a dialogar con las asociaciones de militares para intentar llegar a un acuerdo y encontrar un encaje que permita que la mayoría de los militares que lleguen a la zona, de los cerca de 1.200 que está previsto, lo hagan de forma voluntaria.

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