Debate confirmación

Mayo es el mes por antonomasia para los que somos católicos como el mes de las comuniones. Pero a este paso también va a ser el mes de las elecciones en España. Poco o nada se está hablando de Europa, de donde emanan la mitad de nuestra normativa, y por ende, nuestra vida cotidiana. Y es también de Europa donde las zonas más pobres, como la nuestra, en habitantes y un mundo rural importante, deben de recibir ayudas a planes europeos que combatan nuestra carencia de infraestructuras, servicios y, en definitiva, un futuro para nuestras comarcas al menos. La lenta pero paulatina lista de pueblos abandonados crece a cada comicio.

Pero este panorama, serio, no se presenta igual en el mágico eje Valladolid-Burgos y, de rebote, algo le toca a Palencia. El hecho de elegir un presidente de la Junta de Castilla y León de otras provincias abre también las esperanzas de sus ciudades respectivas a los candidatos.

Y hablando de candidatos, el pasado martes se celebró el primer debate a cuatro en RTVCYL. Con una cuidada organización. Allí pudimos ver y escuchar los que ya hemos barruntado en semanas atrás. Podemos basa su discurso en todo mal y catrastrofista. Ciudadanos abriéndose cada vez más descaradamente al cambio de Gobierno, lo que conlleva subliminalmente un apoyo claro al socialismo como confirmación de blanca marca suya que es y no entendemos ese error abandonando su propia esencia centrista que tan bien le ha ido a nivel nacional. Y por último, un Partido Popular por primera vez asediado pero que defiende la transición tranquila y un cambio de época en el Gobierno regional.

Hablando de RTVCyL mucho ha sorprendido a lo largo y ancho de las nueve provincias y media la noticia publicada por Esnoticias y replicada por muchos medios sobre una supuesta subvención en dos conceptos y pagos a este medio de comunicación por un importe superior a los 40 millones de euros. Mientras tanto, en una economía de libre competencia, son legión los que esperan las licencias locales de televisión digital y emisoras de radio, lo que modificaría bastante el actual status quo informativo.