Incendio declarado el pasado fin de semana en la Sierra del Tiétar
Incendio declarado el pasado fin de semana en la Sierra del Tiétar - ICAL
Medio Ambiente

El calor y la sequía alertan de incendios incontrolables y peligro para la población

Drones. cámaras y móviles se suman por primera vez en la lucha contra el fuego

León Actualizado: Guardar
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Las perspectivas de la campaña de incendios «no son nada halagüeñas» y si se mantiene el calor y la ausencia de lluvia «la vegetación tendrá un elevado estrés hídrico y arderá fácilmente» hasta el punto de que los fuegos «pueden pasar rápidamente a copas del arbolado y hacerse difícilmente controlables» y se den «situaciones de peligro altas para los combatientes y la población». Será por tanto un verano «difícil» en el que los días con «condiciones meteorológicas» más adversas habrá fuegos que afecten a una superficie mayor de lo habitual e incluso lleguen a «acumulares varios grandes incendios», algo habitual cuando el estío es «malo». Así aparece recogido en la documentación entregada ayer en León y desgranada por el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, quien admitió que las previsiones «no son buenas» al encontrarse «el matorral y el arbolado en situación crítica con un contenido muy bajo de humedad en tierra por la sequía y las altísimas temperaturas».

Para luchar contra este complicado panorama se ha diseñado un operativo que tiene en cuenta «el importante riesgo de incendios» en las próximas semanas y meses y al que se destinan 5 millones de euros más que el año pasado para un total de 4.350 efectivos, 116 más que el año anterior.

Y es que los meses previos al inminente comienzo de la campaña de alto riesgo -la Junta decretó el peligro medio desde el 9 de junio- tampoco han sido precisamente positivos. Así, entre enero y mayo pasados Castilla y León registró 1.492 incendios forestales, que suponen un 119% más que la media de los últimos 10 años en el mismo periodo, según explicó el consejero, quien no obstante, destacó que el porcentaje de estos incendios que quedó en conatos (menos de una hectárea) fue el 55%, lo que «indica la eficacia del operativo de extinción».

En todo caso, las más de 2.000 hectáreas arboladas calcinadas en estos primeros cinco meses del año, así como las más de 10.000 de superficie forestal están entre los peores datos de los últimos datos del año debido también, como reiteró Suárez-Quiñones, a las «excepcionales condiciones climatológicas del año» que han provocado por ejemplo el abril «con mayor siniestralidad de la historia».

Suárez-Quiñones detallóque el «equipo» de extinción lo forman 2.437 trabajadores públicos de la Junta -1.114 ingenieros, agentes medioambientales y forestales y celadores-, 1.323 trabajadores de centros de mandos, torres de vigilancia y autobombas y 1.913 contratados a través de empresas (467 trabajadores de cuadrillas helitransportadas, 1.223 profesionales de cuadrillas terrestres, dedicadas a tratamientos selvícolas, extinción y patrullaje, y 223 en tripulaciones de medios aéreos (aviones y helicópteros) y maquinaria pesada). Además, se contará con la colaboración de los efectivos de los medios del Estado, helicópteros, aviones desplegados en la Comunidad por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama), la Guardia Civil y los miembros de la UME cuando los fuegos alcancen un nivel alto de peligrosidad.

La Junta cuenta además con 31 medios aéreos -26 helicópteros y cinco aviones- propios y del Mapama ubicados en la Comunidad, 201 puestos de vigilancia y cámaras, instaladas en Zamora y Soria, 192 autobombas, 124 pick-up, 188 cuadrillas terrestres y helitransportadas y 26 buldózer.

Una aeronave no tripulada para vigilar

Castilla y León tendrá en esta campaña con una aeronave no tripulada RPA (Remotely Piloted Aircraft) para las labores de vigilancia, observación y apoyo a la extinción a través de un convenio que se firma, este mismo mes, con el Ministerio de Defensa, que centrará su labor en la comarca del Bierzo. Además, con base en Rabanal del Camino (León), se habilita un dron con toma de imágenes nocturnas de los incendios contratado por el Mapama y una nueva aeronave de coordinación de medios aéreos y toma de imágenes también del Ministerio se ubicará en Rosinos de la Requejada (Zamora).

Los agentes medioambientales, celadores y técnicos de guardia dispondrán de un «smartphone» con aplicaciones incorporadas que redundan en su seguridad y mejoren el control de medios y recursos en el incendio, y permiten el intercambio de imágenes, archivos e información meteorológica instantánea, además de posibilitar que estén localizados en todo momento, al igual que el resto de medios materiales.

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