Patricia González, 9 récords de España y subcampeona del mundo en natación: «Cada vez cuesta más encontrar una perla»

La nadadora Patricia González Megía, del club Monteverde de Toledo, está saboreando los últimos tres récords de España, en la categoría Máster +25, que acaba de firmar en Pontevedra: 100 metros estilos, 200 braza y 100 mariposa.

Con ellos, esta valdepeñera de 28 años ya suma nueve plusmarcas nacionales en cinco años; un palmarés que cinceló además en 2019 con un subcampeonato del mundo en 100 metros braza, también en la categoría +25.

«No está mal» , responde cuando habla de sus marcas, que están entre las veinte mejores del país en categoría absoluta. Especialista en estilos, ha competido junto a Mireia Belmonte -campeona olímpica, mundial y europea-, y su objetivo prioritario es el campeonato de Europa que se celebrará en Roma en agosto.

Hasta entonces, Patricia González compaginará sus entrenamientos con las clases en el Instituto de Educación Secundaria Princesa Galiana, en la ciudad de Toledo, adonde llegó en septiembre como profesora de educación física después de aprobar las oposiciones. La preparación de los exámenes y pandemia, la apartaron «un poquito» de la piscina los últimos dos años. Pero esta graduada en Ciencias del Deporte ha vuelto a pisar la pileta con fuerza y con la ilusión de aquella niña que comenzó a nadar con 9 primaveras . Tanto que, en Pontevedra, firmó un póquer de oros con otro primer puesto en 100 braza.

Con 18 comenzó su etapa como entrenadora y varias decenas de jóvenes deportistas, además de adultos, han pasado por sus manos. «Actualmente, cuesta mucho encontrar alumnos, niños, que estén comprometidos [con el deporte]; que el esfuerzo para ellos esté en su día a día, que esté en su ADN. Con cualquier tipo de tarea ya es difícil, pues imagínate relacionado con el deporte». Hace una excepción: «Salvo que lo hayan mamado desde pequeño en sus familias» . Por eso «cada vez cuesta más encontrar alguna perla, pero no ya de alto nivel, sino de nivel medio», afirma esta deportista, quien a los 22 años años empezó a entrenar a nadadores del Monteverde.

Ella pensaba que, como profesora de educación física en un instituto, encontraría alumnos que se iban a esforzar más para obtener mejor nota, «que pondrían más esfuerzo». Pero no. «Se nota el que trae de casa el amor por el deporte» , insiste Patricia González, quien seguirá dando brazas hasta que el cuerpo aguante. «Todavía queda carrete», avisa.