Susana Díaz se aferra al PSOE «histórico» y «ganador» para vencer en las primarias

Un día antes del esperado debate a tres en la sede del PSOE, Susana Díaz reivindicó este domingo para sí ser la candidata a la Secretaría General que representa al PSOE de 140 años de historia, con los valores de siempre, que ha ganado elecciones y ha construido España: «un PSOE cien por cien PSOE que no se avergüence de su historia de 140 años». En Toledo, feudo de uno de sus principales apoyos internos en toda España, Emiliano García-Page, también lanzó una advertencia a otros partido asegurando que el PSOE presenta un «proyecto autónomo, sólido y sin complejos» y, por lo tanto, advirtió de que ningún partido les va a acomplejar, ni les va a «humillar» ni les va a «poner de rodillas».

En su intervención ante unas 800 personas en un edificio de al Universidad no hizo alusiones concretas a sus otros adversarios, aunque aseguró que no debe insultarse a nadie, y solo antes del acto manifestó a los periodistas que el debate de hoy entre los tres candidatos socialistas a liderar el partido «tendrá el tono de los que formamos parte de una misma familia». Aludió al hecho de que los medios de comunicación «buscan un debate similar a los electorales, pero esto es un debate dentro del partido, entre los compañeros de militancia, y tendrá siempre este tono de los que formamos parte de una misma familia». Preguntada también sobre las últimas encuestas publicadas, la dirigente socialista respondió que tiene «ilusión y unas ganas enormes» y que «cada día vamos a más».

Durante muchas fases de su mitin de campaña interna la presidenta andaluza apeló al «orgullo de partido» y a la «autoestima» como única vía de que el partido recupere la moral de victoria. Como receta interna, pidió respeto para todos los candidatos y que no se insulte a nadie porque quiero ser la secretaria general de todos los socialistas: «no quiero el voto del insulto ni el de los que insultan». «Fraternidad, respecto y unidad», pidió Díaz para este proceso.

En esea constante reivindiación del PSOE de siempre y de su memoria histórica puso de manera reiterada como referentes a los dirigentes históricos del partido, con especial incidencia en las figuras de Felipe González, Alfonso Guerra y José Luis Rodríguez Zapatero, a este con sus luces y sombras, e incluso a Ernest Lluch. «España sería peor si no hubieran gobernado Felipe González y Rodríguez Zapatero», dijo.

Rebeldía pidió también Susana Díaz a sus seguidores, «porque somos el PSOE de la rebeldía de Felipe González y Alfonso Guerra para alcanzar la mayor mayoría absoluta alcanzada en España; la rebeldía de Zapatero para defender la igualdad, y por eso yo hoy os pido rebeldía para que nos levantemos y seamos el PSOE cien por cien PSOE».

Susana Díaz destacó ante su militancia el proyecto «autónomo» que representa el PSOE, con el mensaje de que el PSOE no debe tener complejos ante nadie. «¿Quién nos va a acomplejar? ¿Rajoy? ¿Rajoy está para acomplejarnos?», se preguntó Díaz, que rechazó que «esta derecha» pueda hacerlo, «no solo por la relación turbia que tienen con la instituciones» que en su opinión «avergüenza y abochorna» a los ciudadanos y que «no hay plasma que le salve», sino también por el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2017, que «no responde a las necesidades de los territorios del país, sino que los ha hecho pensando en él mismo».

«Nadie nos va a humillar»

También se preguntó si Podemos puede acomplejar al PSOE, al tiempo que criticó que un partido intente «interferir en los procesos internos de otros partidos». Sin embargo, la andanada más directa para otras filas la dirigió contra el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, al que advirtió de que «tiene que tener claro que no voy a permitir nunca, no solo que se manche la dignidad de los socialistas, sino que nadie nos diga lo que tenemos que hacer», y añadió que «al PSOE nadie le va a decir lo que tiene que hacer, nadie nos va a humillar, nadie nos va a poner de rodillas, nos vamos a defender libremente lo que queremos hacer». «No va a hacer con el PSOE lo que ha hecho con otras fuerzas de izquierda», sentenció Susana Díaz. Además tachó a la formación morada de «izquierda inútil cuando le hace el juego a la derecha y es inútil cuando se ponen los intereses de un partido, el teatro y el espectáculo, por delante de la vida de las personas».

Diaz también aprovechó su acto de campaña en Toledo para anunciar las reivindicaciones que hará al Gobierno de Mariano Rajoy si es elegida secretaria general de su partido. La primera es poner en marcha una movilización que conduzca a la derogación de la reforma laboral, que calificó de reforma «injusta». A su juicio, el actual marco laboral está «triturando los derechos» de los trabajadores y abriendo una importante «grieta social». «Si tengo la confianza para ser la secretaria general de este partido, trabajaré para que se derogue», afirmó. Asimismo, anunció que la primera medida que llevará a cabo el lunes posterior a la votación de las primarias para liderar el partido, en el caso de ganarlas, «y que me escuche Rajoy, será exigir de manera inmediata y urgente que se ponga en práctica el pacto contra la violencia de género», porque no se puede permitir que sigan muriendo mujeres en este país. También pidió mejoras en sanidad y educación, empezando por la educación gratuita de lso niños de 0 a 3 años.