En un comunicado, la Real Academia ha explicado que tiene previsto realizar un estudio-consultoría sobre el estado de conservación de los bienes culturales de la provincia para señalar los que puedan estar en peligro y procurar que se tomen las medidas oportunas para subsanar sus problemas de conservación.
Esta «lista roja» de monumentos y espacios medioambientales será presentada cada año a las instituciones públicas y a los medios de comunicación social y se publicará en su web. Conforme quede garantizada su conservación se irán retirando los bienes en los que se intervenga.
La «lista roja» del patrimonio será doble, una dedicada a los bienes de carácter monumental y otra a los de carácter ambiental, ha agregado la Academia, y en ella participarán no solo los académicos numerarios sino la «larga lista» de miembros correspondientes que forman parte de la Real Academia y está repartidos por la provincia.
Con esta medida, la institución centenario pretende alertar sobre el estado de los monumentos antes de que sus condiciones sean «irreversibles».
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