Sánchez elude defender al Rey frente al acoso separatista
El presidente dice que Don Felipe «siempre ha tendido puentes con Cataluña»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, eludió ayer responder a la pregunta de ABC de qué va a hacer el Ejecutivo para apoyar al Rey frente a la campaña de acoso que está sufriendo por parte de las autoridades separatistas catalanas.
Sánchez se trasladó ayer a Palma de Mallorca para mantener su primer despacho de verano con Don Felipe -al que llegó diez minutos tarde- y, a la salida, compareció ante los medios de comunicación en los jardines del Palacio de Marivent. Allí, en la misma residencia del Rey, el jefe del Ejecutivo afirmó que el Gobierno va a «dar normalidad» y que esa será la respuesta de su Gobierno a la campaña de acoso que está recibiendo la Corona por parte de los separatistas. «Lo que estamos haciendo es precisamente dar normalidad a hechos tan importantes como el 17 y 18 de agosto», dijo, en alusión a los actos del aniversario de los atentados de Barcelona y Cambrils, a los que acudirá el Rey y, según anunció Sánchez, le acompañará también la Reina.
Poco antes, y en respuesta a otro periodista, el jefe del Ejecutivo dijo que «lo importante es no olvidar el por qué nos congregamos todos en Barcelona el 17 y 18 de agosto». El presidente del Gobierno se explayó en la defensa de las víctimas de los atentados, que se merecen un homenaje digno, pero en ningún momento censuró los ataques al Rey, que precisamente acudirá a Barcelona para llevar la solidaridad de todos los españoles a las víctimas , como hizo hace un año, cuando los separatistas le hicieron una encerrona. El jefe del Ejecutivo insistió en que se trata de una convocatoria «contra el terrorismo y por la solidaridad con las víctimas y sus familiares» y que «no hay fisura posible». Olvidó que el año pasado las protestas separatistas y el acoso al Rey se impusieron al apoyo a las víctimas. «Ahí vamos a estar todos -continuó Sánchez-, desde el primero al último de los españoles. Ahí estara el Jefe del Estado, el Rey y la Reina, y por supuesto también el Gobierno, mostrando la solidaridad con las víctimas y sus familiares».
La polémica
El presidente del Gobierno también se refirió a las polémicas declaraciones que había realizado el presidente del Parlamento balear, Baltasar Picornell , tras reunirse con el Rey el lunes de la semana pasada. Como publicó ABC, Picornell atribuyó primero a Don Felipe una función que corresponde al Gobierno -dijo que el Rey estaba dispuesto a «tender puentes» con Cataluña y estaba «intentando hablar con las partes»-, y dos días después reconoció en su muro de Facebook que había tergiversado las palabras la Rey porque no habla bien español.
Una periodista preguntó ayer a Sánchez si él también tenía la impresión de que Don Felipe quería tender puentes con Cataluña, y su respuesta fue sorprendente en boca de un presidente del Gobierno, pues como se sabe es quien refrenda todos los actos del Rey: «Yo no soy portavoz de nadie», dijo, y «creo que la Casa Real y el Jefe del Estado se expresan en sus intervenciones, y hay que interpretar sus intervenciones públicas. Creo que son bastante claras».
«Tenemos un Jefe del Estado que entiende la España plural , que entiende la diversidad de nuestro país y que siempre ha tendido puentes con Cataluña», añadió. «Tenemos un Jefe de Estado que reconoce y se reconoce en esa pluralidad. A partir de ahí el Gobierno de España está es en dar respuesto a los problemas de los ciudadanos de Cataluña», agregó.
El jefe del Ejecutivo también expuso los asuntos de los que había tratado con el Rey en el despacho de verano, que se prolongó alrededor de una hora. Entre ellos, la Comisión Bilateral entre el Gobierno y la Generalitat de Cataluña celebrada el pasado miércoles, después de siete años inactiva. Además, informó a Don Felipe de la estrategia económica del Ejecutivo, basada en consolidar el crecimiento económico, crear empleo digno y redistribuir el crecimiento, y le puso al día también de las medidas adoptadas por el Gobierno en materia de inmigración, sanidad, violencia de género y cooperación entre las comunidades autónomas.
Sin críticas a Casado
Sánchez no quiso referirse al caso del máster del líder del PP, Pablo Casado, que ha sido trasladado al Tribunal Supremo. «Lo que me corresponde como presidente del Gobierno es no calificar ninguno de los procedimientos judiciales que estén abiertos. Lo que tienen que hacer los actores políticos incumbidos es hacer una valoración y dar explicaciones a los ciudadanos. Y ahí me quedo», afirmó.
Tras comparecer ante la prensa, Sánchez y su esposa, Begoña Gómez, que le acompañó a Mallorca, se quedaron a almorzar con los Reyes en el Palacio de Marivent , siguiendo una costumbre que se interrumpió en tiempos de Mariano Rajoy. Después de degustar unos lomos de caballa en escabeche con verduras, pargo al horno, sorbete de cerezas y, de vino, verdejo blanco, el presidente del Gobierno se trasladó al Consulado del Mar, sede del Gobierno balear, donde se reunió con la presidenta autonómica, la socialista Francina Armengol. A media tarde, Pedro Sánchez y su esposa emprendieron regreso a Doñana, donde pasan unos días de vacaciones.
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