El Rey reivindica el empeño vigente de Ortega y Marañón por vertebrar y cohesionar España

Don Felipe reaparece en un acto en Madrid, después de que Sánchez le prohibiera acudir el viernes a Barcelona

Advierte de que el progreso sin cultura lleva a la sociedad a «caer en la degradación o la decadencia»

Don Felipe, este lunes en la Fundación Ortega Marañón Casa del Rey

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El Rey reapareció este lunes en público después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le prohibiera asistir el pasado viernes a la entrega de diplomas a los nuevos jueces en Barcelona. Don Felipe lo hizo acompañado de dos legados excepcionales , los de José Ortega y Gasset (1883-1955) y Gregorio Marañón (1887-1960), dos intelectuales que en 1931 creyeron que la República ayudaría a vertebrar y a democratizar España. Y no solo se decepcionaron -«No es esto, no es esto», clamaba Ortega, diez meses después de crear la Agrupación al Servicio de la República-, sino que ambos tuvieron que exilarse en 1936 del Madrid republicano para salvar sus vidas.

La experiencia de Ortega y Marañón habría dado mucho juego ayer al Rey para reflexionar serenamente sobre el hervidero en el que se ha convertido la España de hoy. Pero Don Felipe cuidó sus palabras para no avivar la tensión en un país muy presionado ya por la situación política, por la pandemia y la recesión económica. Allí estaba Don Felipe cuando se conoció la noticia de que el Tribunal Supremo había inhabilitado al presidente de la Generalitat, Quim Torra.

Tras inaugurar las nuevas instalaciones de la Fundación José Ortega y Gasset-Gregorio Marañón, el Monarca presidió la presentación de la edición digital de las obras completas de Ortega , que calificó como «un hito de enorme interés». Y es que los diez volúmenes estarán disponibles desde hoy en formato digital, gracias al proyecto puesto en marcha por la Fundación y la editorial Taurus. Cada tomo digital costará 16,99 euros (frente a los 50 del tomo impreso) y, como destacó el Rey, podrá «llegar al último rincón de la Tierra».

"Yo soy yo y mi circunstancia"

Antes de tomar la palabra, el Rey visitó la colección personal de Ortega y contempló su atril y algunos de sus manuscritos, como los de «La Rebelión de las masas», «Qué es Filosofía» y el que recoge la célebre frase de Ortega «yo soy yo y mi circunstancia». Durante el acto, que se celebró en el jardín, estuvo acompañado por la presidenta y la vicepresidenta del Congreso, Meritxell Batet y Ana Pastor, y por el ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, quien afirmó que «este acto se realza y engrandece» con la presencia del Jefe del Estado.

Ante ellos, el Rey recordó el empeño de ambos intelectuales «por la vertebración, cohesión y modernización de España» y por «su integración en Europa». Ortega y Marañón, dijo, son «dos figuras egregias de la España del siglo XX, pero su pensamiento y clarividencia de hace ya un siglo están siempre muy presentes y renuevan su relevancia para nuestro tiempo», añadió, antes de reconocer que él nunca se «ha alejado» de la obra orteguiana.

Además, el Rey hizo una defensa cerrada de la cultura como «pulso y nervio de una nación». Sin ella, advirtió, «no es posible el progreso profundo de una sociedad sin caer en la degradación o la decadencia». En estos momentos de revisión sesgada de la historia , Don Felipe añadió que «en cultura hay que sumar y no restar», y agregó que «con este acto sumamos de nuevo pensamiento, formación y cultura al presente de la Nación».

También elogió la edición digital de la obra de Ortega, «nuestro clásico contemporáneo», porque representa «una guía y una referencia esenciales». Las obras «son las mismas», pero «su lectura se actualizará, volverá a resonar su verbo firme, su inteligente y sensible interpretación de los asuntos de la vida y del pensar, con nuevos ímpetus y nuevos lectores». Y destacó que Ortega fue uno de los primeros que puso de relieve «la formidable carga que contiene la expansión de la lengua española, su presencia en América».

En el acto también intervino Gregorio Marañón y Beltrán de Lis , presidente de la Fundación, quien agradeció la presencia del Rey: «Que en estos momentos de tanta zozobra dediquéis este tiempo para inaugurar nuestra sede» dice mucho de «vuestro compromiso con la causa de la cultura». Relató que la publicación de la obra digital de Ortega es el resultado de diez años de trabajo riguroso en el que han intervenido quince investigadores. «Ortega sigue siendo hoy un referente para la vida intelectual. Nos lo confirman sus lectores, el interés de las editoriales y la petición de traducciones desde diversos lugares del mundo», añadió.

Ejemplo de patriotismo

«Ortega y Marañón nos dejaron un ejemplo de liberalismo y de ese recto patriotismo al que se refería Galdós -relató el presidente de la Fundación-. Un patriotismo asentado sobre un compromiso cívico que les llevó a formar parte de las Cortes Constituyentes de 1931 y a padecer luego años de exilio, alimentando hasta el final de sus días la esperanza, confirmada, de que las nuevas generaciones alumbrarían de nuevo la democracia en nuestro país y lograrían la reconciliación entre todos los españoles. Así fue, y hoy es obligación de todos recordar que la tarea continúa».

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