¿Por qué se derrumbó el edificio de Tenerife?

Los técnicos municipales continúan trabajando para asegurar las labores de rescate en el edificio derrumbado en Los Cristianos, en el término municipal de Arona (Tenerife). Al mismo tiempo están tratando de esclarecer las causas del colapso, para las que barajan dos hipótesis. Por un lado se investiga si el derrumbe «pudo deberse a una explosión, ya que varios testigos aseguraron que en el inmueble olía a gas en ese momento». Tampoco se descarta que el origen esté en unas obras de remodelación que se estaban llevando a cabo en el segundo piso.

Según algunos vecinos, los propietarios no contaban con la correspondiente licencia emitida por el Ayuntamiento y hay quienes afirman que los golpes que daban eran muy fuertes.

Las mismas fuentes apuntan a que habrían afectado a la estructura del inmueble.

En declaraciones a los medios, el Presidente del Cabildo, Carlos Alonso, ha asegurado que los técnicos están trabajando en asegurar el edificio y después analizarán las causas por las que cayó. Lo mismo que el Delegado del Gobierno en Canarias, Enrique Hernando, que ha señalado que lo primero que se va a hacer es buscar a las víctimas y derribar el único muro que ha quedado en pie por riesgo de derrumbe.

En este sentido, Enrique Hernández Bento ha comentado que no hay un plazo fijo para acabar los trabajos. «Está siendo difícil identificar a algunas personas porque son de nacionalidad extranjera», ha asegurado. Al tiempo que ha reconocido que es «muy precipitado» llegar a alguna conclusión sobre las causas del derrumbe. «Aventurar cualquier teoría no procede, hay que ser paciente», ha destacado.

[En imágenes, así quedó el edificio tras el derrumbe]

Cuatro edificios desalojados

Además, siguen desalojados cuatro edificios colindantes a la zona del siniestro –Bruno, Linares, Chicharro y Porlamar– con un total de 89 personas correspondientes a 42 familias, de las que 22 han sido realojadas en hoteles y cámping del municipio, y otras 20 se han trasladado a viviendas de familiares.

Asimismo, se mantiene el servicio de atención a las familias en el centro cultural, en el que un grupo de psicólogos, Cruz Roja, trabajadores sociales y traductores asisten a las familias y residentes del edificio.