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Iñaki Urdangarín - EFE

Urdangarín incurre en contradicciones sobre la supuesta supervisión de la Casa del Rey en Nóos

El exsocio de Torres ha negado que Doña Cristina fuese «un escudo fiscal» en Aizoon

El asesor Salvador Trinxet dice que de parte de Torres le pidieron que facilitase la adquisición de tres sociedades en el extranjero

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La segunda parte de la sesión de este jueves del juicio del caso Nóos se ha iniciado en torno a las 16.15 horas, tras un receso al mediodía. El fiscal Anticorrupción, Pedro Horrach, ha pedido a la presidenta del tribunal, Samantha Romero, si podía formular varias preguntas a Iñaki Urdangarín, después de que hubiera acabado su interrogatorio el abogado de Diego Torres, Manuel González Peeters. Horrach quería confirmar si Urdangarín había abandonado efectivamente el Instituto Nóos en marzo de 2006.

El fiscal también quería confirmar si los proyectos de Nóos habían sido supervisados previamente por la Casa del Rey, como ha afirmado Urdangarín en diferentes momentos en estos últimos días. Romero ha hecho notar una contradicción, en el sentido de que en la fase de instrucción Urdangarín había afirmado que «la Casa del Rey no opinó, conoció o avaló las actividades de Nóos». Urdangarín ha señalado que en aquel momento desconocía las circunstancias exactas acerca de la información facilitada a la Casa del Rey.

Por su parte, el abogado de Doña Cristina, Pablo Molins, ha criticado la «gravedad» de la actuación de la abogada de Manos Limpias, Virginia López Negrete, en relación a las preguntas que había hecho por la mañana sobre Aizoon, la mercantil cuya titularidad compartían Urdangarín y Doña Cristina. Urdangarín ha explicado esta tarde que los gastos citados por López Negrete eran abonados por la tarjeta conjunta del matrimonio. «No los pagó Aizoon», ha indicado.

«Nunca ha intervenido en la economía familiar», ha dicho Urdangarín en relación a su esposa. También ha negado que Doña Cristina fuese utilizada como un «escudo fiscal» en Aizoon. «Por supuesto que no», ha afirmado.

Molins le ha preguntado a continuación si Doña Cristina conocía la estructura interna de Aizoon. Urdangarín ha respondido que su esposa no conocía nada sobre la gestión de la citada mercantil. Ha añadido que su esposa tampoco tenía conocimiento de los ingresos o los gastos en Aizoon. Urdangarín ha desvinculado por completo a Doña Cristina de cualquier decisión en la mencionada mercantil. Sobre las declaraciones de la renta, ha reiterado que la de la Infanta era realizada por el asesor fiscal de la Casa Real, Federico Rubio. Molins también le ha preguntado a Urdangarín si el matrimonio tiene o ha tenido cuentas en paraísos fiscales. «Nunca hemos tenido cuentas en paraísos fiscales», ha afirmado.

La presidenta del tribunal ha hecho referencia poco después a las «posiciones enconadas» que está percibiendo entre las acusaciones y las defensas, tras varios enfrentamientos verbales en ese sentido. A continuación, ha empezado a hacer preguntas el abogado de Urdangarín, Mario Pascual Vives. El letrado le ha preguntado a su cliente si reconocía su firma en distintos documentos. Urdangarín ha dicho que «no» o que era falsa en la mayor parte de los casos.

Posteriormente, ha dicho que el alquiler de los pisos adquiridos por el matrimonio en Palma era dividido a partes iguales. Urdangarín también ha señalado que en la actualidad no tiene ninguna retribución económica.

Salvador Trinxet

A continuación, ha empezado a declarar el asesor y abogado Salvador Trinxet, quien ha dicho que sólo respondería a las preguntas formuladas por su abogado. Según su testimonio, en 2006 el asesor fiscal Miguel Tejeiro, de parte de Diego Torres, le pidió que les facilitase la adquisición de tres sociedades, dos en el Reino Unido y una en Belice. Una de dichas sociedades era De Goes, que ha sido citada en diversas ocasiones a lo largo del juicio. También le pidieron entonces a Trinxet si conocía algún asesor fiscal en relación a este asunto.

Trinxet ha dicho que le comentaron que las citadas sociedades serían creadas para canalizar la contratación de ponentes extranjeros en los eventos organizados por el Instituto Nóos. En total, Trinxet percibió 12.000 euros por su labor en relación a la adquisición de De Goes y de Blossom Hill. La factura fue presentada a una asesoría en la que trabajaba Miguel Tejeiro. En relación a aquella época, Trinxet ha afirmado que desconocía que Torres estuviera trabajando con Urdangarín.