Rajoy tendrá hoy el primer contacto con Trump y Macron

El presidente Rajoy viajará este jueves a Bruselas para participar en una reunión especial de líderes de la OTAN, dentro de la tradición de convocar una cita al máximo nivel tras la elección de un nuevo presidente de Estados Unidos. En esta ocasión coincide con la inauguración de la nueva sede del Cuartel general de la OTAN. En este contexto, el jefe del Ejecutivo tendrá el primer contacto con Donald Trump, y también con el recién elegido presidente francés, Emmanuel Macron. Aunque no están previstos encuentros bilaterales, habrá tiempo para que Rajoy salude personalmente a ambos.

En el caso de Trump, en la conversación telefónica que mantuvieron tras la toma de posesión del presidente de Estados Unidos, este invitó a Rajoy a visitarle en la Casa Blanca, y dejaron pendiente la fecha.

Ambos volverán a coincidir en la cumbre del G-20 en Hamburgo, en julio, una cita en la que tendrán ocasión de charlar con más sosiego, ya que la reunión de la OTAN está regida por un estricto horario y orden militar.

Rajoy también saludará personalmente a Macron, después de felicitarle por teléfono y coincidir en que España trabajará junto a Francia en favor de «una Europa estable, próspera y más integrada». El Gobierno de Rajoy cree que coincide con el francés en la idea de Europa, en la necesidad de avanzar en el proyecto de integración y en reforzar la Unión, algo en lo que ya había plena sintonía con el anterior presidente de Francia, François Hollande.

La reunión de líderes de la OTAN tendrá una primera parte muy ceremonial, con la presentación de los monumentos en memoria de la caída del Muro de Berlín y de los atentados del 11-S. Además, el Rey de los Belgas presidirá la entrega del nuevo edificio de la Alianza. No habrá comunicado oficial, pero sí intervenciones de los líderes en la cena de trabajo. El reparto de cargas entre los miembros de la OTAN y la lucha contra el terrorismo internacional formarán el núcleo del encuentro.

El reparto equitativo de cargas contra de tres elementos: el compromiso de gastos de defensa de la Cumbre de Gales de 2014, con el objetivo del 2 por ciento del PIB en diez años (España está en el 0,90 por ciento); los objetivos de adquisición de capacidades que cada Aliado establece conjuntamente con la OTAN, y el compromiso político de contribuir a la seguridad colectiva mediante la participación de operación militares de la OTAN, y también de la UE, la ONU y la Coalición contra Daesh. España tiene el reconocimiento de sus socios y aliados por su participación en misiones por todo el mundo.

En esta reunión se debatirá sobre la necesidad de que cada aliado plasme en un plan nacional cómo pretende alcanzar el 2 por ciento del PIB en defensa en el año 2024. El Gobierno de Rajoy subraya que España es un contribuyente destacado en la seguridad colectiva, al participar en operaciones de la OTAN, pero también es el segundo mayor contribuyente en las misiones militares de la Unión Europea y mantiene un destacado contingente de Naciones Unidas en el Líbano. «España entiende que una cifra fría, como la del 2 por ciento, no mide el esfuerzo global de un país como el nuestro», afirman fuentes del Gobierno.

La lucha contra el terrorismo internacional será el otro punto fuerte de la reunión, con importancia redoblada tras el atentado de Manchester. Se incidirá en la respuesta de la Alianza, con un Plan de Acción que incluye iniciativas en marcha con la Misión en Afganistán y los programas en Irak, Jordania y Túnez, así como las nuevas que se puedan acordar en esta cumbre. En la Coalición contra Daesh hay ahora mismo 69 países, liderados por Estados Unidos, y se busca que la OTAN pueda formar parte de ella, como ya lo están la Liga Árabe o Interpol. La solución práctica que podría tomarse es la participación de la Alianza en los debates políticos de la coalición.

La nueva sede de la OTAN en Bruselas, que ha costado unos 1.200 millones de euros, sustituirá a la que se construyó en 1967, aunque está seguirá parcialmente en uso hasta marzo de 2018. De hecho, la cena de trabajo de los líderes será en el edificio viejo. En ese cena, el presidente Rajoy tomará la palabra para exponer su posición ante los retos de la OTAN.