La pugna de Iglesias y Errejón por las siglas bloquea la negociación

La gestora que controla Podemos Madrid aún no tiene planteadas las primarias internas

Izquierda Unida no quiere que la debilidad de Podemos le afecte y pide modificar la marca

El candidato de Más Madrid en la Comunidad de Madrid, Íñigo Errejón, y el líder de Podemos, Pablo Iglesias EFE

Gregoria Caro

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El lado izquierdo del espectro político madrileño se ha convertido en un polvorín desde el estrepitoso portazo de Íñigo Errejón a Pablo Iglesias el 17 de enero. El cofundador de Podemos tenía el compromiso de defender una candidatura popular en los comicios autonómicos, pero la dinamitó para concurrir bajo el paraguas de Manuela Carmena. La semana pasada transcurrió bajo una maraña de encuentros bilaterales entre Podemos, Más Madrid, Izquierda Unida y Equo, pero sin avances. El pulso entre Iglesias y Errejón se ha estancado en el terreno de las negociaciones . Es una guerra de desgaste. La batalla para ver bajo qué siglas y quién liderará el futuro proyecto de unidad en la Comunidad de Madrid.

El miércoles se reunió de urgencia el Consejo Ciudadano Estatal de Podemos para intentar frenar la crisis sin precedentes en la que está sumido el partido. Las discrepancias internas –también dentro del sector oficial– y el malestar entre los líderes regionales obligaron Iglesias a recular : «Íñigo, a pesar de todo, no es un traidor, sino que debe ser un aliado». El plan de Podemos es rebajar el tono, pero, por ahora, no renuncian a presentar una candidatura alternativa. Iglesias quiere reparar el espacio de Unidos Podemos junto a Izquierda Unida y cede, en última instancia, a negociar con Más Madrid. Pero siempre bajo las siglas moradas . La negociación final quedará en manos del equipo técnico regional, afín al pablismo, que se nombró después de que el líder madrileño, Ramón Espinar , dimitiera el día 25 por sus discrepancias para medirse contra Errejón en las urnas.

Por su parte, el ex número dos de Podemos no se plantea pasar a un segundo plano y el jueves invitó a todos los actores políticos a presentar a sus candidatos dentro de las primarias de Más Madrid. Iglesias no contempla este movimiento porque supondría replegarse a Errejón . Por eso insiste en elaborar primero una lista propia y luego negociar con Unidos Podemos como base del proyecto. En Podemos Madrid, sin embargo, no tienen claro que la ruta dictada por la cúpula sea la más sensata. Tras la renuncia de Espinar se sigue evidenciando el malestar que existe en la formación con la estrategia de articular una candidatura alternativa a la de Más Madrid.

Fuentes de la gestora que controla la región aseguran a ABC que por el momento «no están hablando de primarias internas». Y aunque insisten en que no pasarán por el aro de Errejón —el acuerdo marco es Unidas Podemos porque así lo ha defendido la militancia—, no niegan directamente concurrir en su proceso interno tras la invitación —«No tenemos nada que comentar»—. La sensación es de incertidumbre .

Infidelidades políticas

El bloqueo que genera el pulso entre Iglesias y Errejón angustia a los aliados políticos, que han empezado a mantener contactos entre ellos para evitar que se siga fracturando la izquierda madrileña. Aunque Izquierda Unida y su dirección regional difieren en sus estrategias para superar el cisma a cuatro meses de los comicios autonómicos. Por un lado, el coordinador federal de IU, Alberto Garzón , cierra filas con Iglesias, con quien tiene firmado un acuerdo; y por otro, en IU Madrid empiezan a coquetear con la plataforma de Errejón.

El responsable de relaciones políticas de IU Madrid, Álvaro Aguilera, rechazó la confluencia rubricada con Podemos esta semana. « Unidos Podemos no es una marca viable para la Comunidad de Madrid», expresó en declaraciones a Efe el jueves. Además, su formación ha mantenido encuentros esta semana con todos los actores políticos para trazar una ruta que transciende los lindes acuerdo marco. Los principales dirigentes de la dirección regional y de Más Madrid y Equo han coincidido en «la necesidad de construir una candidatura conjunta» para quitarle las llaves de la Comunidad de Madrid al Partido Popular. De hecho, IU Madrid ha convocado a todos los grupos a una nueva reunión este lunes para asentar los cimientos de una confluencia lo más amplia posible. Podemos ya advirtió de que no asistirá a la reunión.

IU rechaza el sello

La coordinadora federal de IU ratificó en un comunicado enviado después del Consejo Estatal de Podemos el pacto de confluencia, aunque rechazan las siglas con las que concurrir el domingo 26 de mayo. El partido de Garzón apunta ahora hacia un espacio llamado «Unidas» y se desentiende de las siglas moradas . La marca no ha dado los resultados esperados y en IU no quieren que la debilidad que pueda provocar la nueva crisis les reste votos.

En el texto aseguraron que el acuerdo marco nació por «necesidad incuestionable de reforzar el espacio institucional de la izquierda» y ante el auge de PP, Ciudadanos y Vox consideran que la fórmula «Unidas» servirá para abrir el espacio a «otras experiencias municipales, movimientos sociales y ciudadanía sin ninguna adscripción partidaria». Además, una advertencia a Podemos : «Hasta mediados de febrero trabajaremos por ampliar los acuerdos a más territorios, garantizando en última instancia que allá donde no sean posibles, IU presentará candidatura en cualquier caso». Es decir, que en aquellos territorios donde en dos semanas no haya acuerdos con el partido liderado por Iglesias se dará por roto el pacto.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación