El PSOE, sin rostro visible para defender su «no» durante la moción de censura de Podemos

La fijación de fecha para el debate de la moción de censura de Podemos coge al Grupo Parlamentario Socialista en pleno de compás de espera para la renovación de su dirección, tras la dimisión de Antonio Hernando como portavoz del grupo tras la victoria de Pedro Sánchez el pasado domingo.

Tal es así, que nadie sabe cuál de los diputados socialistas será el encargado de defender el «no» ya anunciado a la moción de censura de la formación morada. Fuentes de la dirección actual apuntan a que el candidato que tenga en mente Sánchez para ocupar la portavocía del grupo debería asumir esta tarea como estreno.

Esperan que sea el nuevo líder el que dé el próximo paso y subrayan que la dirección del grupo no tiene ninguna reunión por delante convocada donde pueda tratarse este tema o debatirse una posible interinidad.

Los dos coordinadores de la campaña de Sánchez, José Luis Ábalos y Adriana Lastra, ocupan en el escaño en el Congreso y suenan como posibles nuevos portavoces.

Esta falta de comunicación entre ambos bandos, ocupando despachos cercanos en el mismo edificio del Congreso, revela que las heridas siguen abiertas entre susanistas y pedristas, y las dificultades que tendrá que afrontar el nuevo líder para pilotar un grupo parlamentario que mayoritariamente le ha dado la espalda en las primarias: 69 de un total de 84.

Estas mismas fuentes apuntan a que la actual portavoz adjunta Isabel Rodríguez, expedrista convencida, ha mostrado a su círculo cercano su lealtad con el partido y su disposición a asumir la tarea que le encarguen. Pero que también considera que existen en el Congreso, y dentro de la actual dirección parlamentaria, diputados del equipo de Sánchez que pueden asumir mejor que ella el papel de portavoz, incluso de manera interina hasta el próximo congreso socialista, al conocer en profundidad el proyecto de Sánchez.

En esta línea, desde la dirección actual se reprocha que el equipo del nuevo secretario general no haya dado aún ningún movimiento para llenar el vacío de poder dejado con la salida de Hernando, en un momento de máxima actividad parlamentaria, además de por la moción de censura de Podemos, con la tramitación de los nuevos Presupuestos Generales, echando a andar las comisiones de investigación sobre la financiación irregular del PP y la crisis de las cajas de ahorro.

En Ciudadanos tambíen están a la expectativa de quién dará la réplica a Iglesias en el debate de la moción de censura. La dirección de grupo quiere estudiar el formato del debate pero, sobre todo, conocer si el presidente Mariano Rajoy evita finalmente intervenir. De no ser así, ni el líder del PP ni el del PSOE intervendrían en el pleno, por lo que Albert Rivera podría hacer lo mismo. Pero se trata todavía de un asunto por discutir en las filas naranjas.

Rivera sí que ha valorado esta mañana que «no estamos ante una moción constructiva» ni tampoco ante «un presidenciable que tenga apoyos, sino más bien todo lo contrario». El presidente de Ciudadanos ha asegurado que «el problema es que se presenta un candidato que teóricamente iba a ser independiente y ha acabado siendo el señor Iglesias». Ha recordado también Rivera que Iglesias es el líder «peor valorado», según todos los sondeos que están saliendo: «El candidato que se presenta no genera ningún consenso en la sociedad española».

Donde no ha gustado nada la fecha de la moción de censura ha sido en Podemos, que esperaban que pudiese celebrarse como muy tarde la primera semana de junio. La portavoz de Unidos Podemos, Irene Montero, ha cuestionado la decisión de Ana Pastor: «Lo urgente para España no lo es para el PP ni para la presidenta del Congreso. Secuestran el parlamento».