El precio del primer Valencia Summit ya vino fijado en el borrador del convenio presentado por Nóos

La sesión del juicio del caso Nóos de este viernes ha proseguido, tras un receso a media mañana, con la comparecencia de Jaume Mata, que en el periodo comprendido entre 2004 y 2006 era el subdirector de la Fundación Turismo Valencia Convention Bureau. Esta entidad firmó, junto con la Ciudad de las Artes y las Ciencias (Cacsa), el convenio de colaboración con el Instituto Nóos para la celebración de los Valencia Summit, que se organizaron en 2004, 2005 y 2006. Nóos percibió unos 3,5 millones de euros en total por la preparación de las tres ediciones del citado evento.

Mata ha señalado que Nóos les trasladó un borrador del convenio, sobre el que se hicieron algunas modificaciones.

Aun así, el precio de la primera cumbre —en torno al millón de euros— vino ya fijado por la entidad que dirigían Diego Torres e Iñaki Urdangarín. «Nos vino dado», ha afirmado. Mata ha añadido que en su momento no se cuestionó dicho precio. La aportación económica concreta de la Fundación Turismo Valencia Convention Bureau fue de 450.000 euros en cada edición.

El testigo ha reconocido que desde junio de 2004 se estaba trabajando ya en el primer Valencia Summit, si bien el convenio sobre dicho evento no se firmó hasta septiembre de ese año. Mata ha indicado que el entonces director de la Fundación Turismo Valencia Convention Bureau, José Salinas, fue quien le dijo en la primavera de 2004 que iban a patrocinar el Valencia Summit. La propuesta inicial de colaboración con Nóos había sido presentada por el entonces presidente del patronato de la fundación y vicealcalde de Valencia, Alfonso Grau. Esa propuesta fue aprobada por unanimidad en una reunión del citado patronato.

A preguntas del fiscal Anticorrupción, Pedro Horrach, Mata ha explicado que entre sus propias funciones se encontraban la de supervisar las cuestiones logísticas del Valencia Summit y la de reunirse con colaboradores de Nóos, entre ellos Juan Pablo Molinero, Mario Sorribas y Maite Zazo. Asimismo, ha afirmado que ya conocía previamente a Molinero, quien colaboró en las negociaciones para que Valencia pudiera ser la sede de la Copa América de Vela en 2007.

Preguntado por el abogado de Grau, Jesús Bonet, Mata ha reconocido que nunca recibió ninguna indicación por parte del entonces vicealcalde de Valencia.

Previamente, ha comparecido Tomás Tarazón, quien entre 2004 y 2006 trabajó en el área de marketing de la Ciudad de las Artes y las Ciencias (Cacsa) de Valencia. El testigo ha dicho que su trabajo consistía en computar los gastos de los distintos eventos.