En Barcelona se había prohibido estar en la orilla desde las 20.00 h. de la tarde y en Valencia se han utilizado drones para controlar posibles incidentes
Imagen de la playa de Riazor precintada por la policía para impedir la celebración de hoguerasAT
Es noche de San Juan en Barcelona y no hay ni un alma en la playa. Ni un alma, ni una hoguera. Desde las 8 de la tarde está prohibido pisar la arena. «Es un San Juan atípico» , comenta una joven. Había ganas de fiesta, pero predomina el sentido común. Aun así se han mantenido los controles de alcohol y drogas en los puntos habituales.
También se resignaron anoche en Valencia. Playas desiertas, vigiladas por tierra y aire. «Vamos a mantener el dispositivo durante toda la noche para evitar que pueda resurgir algun incidente», afirma Fernando Las Heras, comisario de la Policía Local de Valencia.
En A Coruña, una estampa similar. Sorprende ver la playa de Riazor precintada y vacía .
En Málaga algunos se han querido llevar el mar a casa, en botellas. Imagen muy distinta en Salou, donde sí han podido bajar a la arena y cumplir con algunas tradiciones de la noche más mágica del año.
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