Uxue Barkos, junto a Adolfo Araiz (Sortu)
Uxue Barkos, junto a Adolfo Araiz (Sortu) - EFE
NAVARRA / ESPAÑA

El partido de Barkos acoge en la Cámara Foral a familiares de etarras no arrepentidos

Etxerat expone hoy en la Comisión de Relaciones Ciudadanas e Institucionales la situación en que viven debido a «la política penitenciaria de excepción»

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Una representación de Etxerat, asociación de familiares de presos de ETA no arrepentidos, acuden hoy a la Comisión de Relaciones Ciudadanas e Institucionales del Parlamento Navarro, para según la web de la Cámara foral, «exponer la situación en que viven debido a la política penitenciaria de excepción». Un término «excepción» que en los últimos años ha acuñado la «izquierda abertzale» pura y dura, para referirse a la política penitenciaria, y que ahora hace suyo Geroa Bai, el partido de la presidenta foral, Uxue Barkos.

En efecto, la solicitud de comparecencia fue presentada por las cuatro «fuerzas del cambio», esto es, Geroa Bai, Bildu, Podemos e Izquierda Ezkerra, que auparon a Uxue Barkos a la presidencia de la Comunidad Navarra.

Como peaje, Barkos hace suya ahora la semántica batasuna. El caso es que el texto del Parlamento no entrecomilla la expresión excepción así que la asume como propia.

No es la primera vez que miembros de este colectivo acuden al Parlamento para denunciar la política de dispersión. En marzo de 2012 ya acudieron a petición de Bildu. En aquella ocasión ni UPN ni PP participaron en la comisión al considerar, según Carlos García Adanero, que «en España no existen presos políticos, sino asesinos». .

En este punto hay que recordar que, tras la advertencia el pasado martes de la presidenta del Parlamento de Navarra, Ainhoa Aznárez, de no dejar entrar en la Cámara foral a una persona que le había increpado en agosto, la portavoz del Partido Popular, Ana Beltrán, le recordó que «en esta Cámara han entrado incluso asesinos de ETA». Pues bien, en aquella comparecencia de 2012 acudió al Parlamento de Navarra, como representante de Etxerat, una de sus cabezas visibles en Navarra, Gloria Rekarte, quien fue condenada a penas que sumaban 60 años de cárcel por los asesinatos del expecialista en desactivación de explosivos de la Policía Francisco Berlanga, en la plaza del Castillo, y de Pedro Fernández Serrano, en el bar Mohicano, ambos en 1979.

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