Otegi atiende a los medios sin admitir preguntas y anuncia una «política nueva»

El exlíder de Batasuna y actual secretario general de Sortu, Arnaldo Otegi, ha comparecido esta mañana ante los medios de comunicación en la sede del Parlamento Europeo, en Bruselas, pero sin admitir preguntas. Y lo ha hecho para anunciar una «política nueva».

«Quiero aprovechar para dirigirme al presidente del Gobierno español y decirle, con absoluta claridad, que tratar de seguir instrumentalizando tanto mi persona como el conflicto vasco para ocultar las graves deficiencias de ese Estado es una estrategia condenada al fracaso», ha dicho Otegi en una breve declaración a la prensa sin preguntas antes de participar en un acto en el Parlamento Europeo para hablar de la situación del proceso político en el País Vasco, invitado por el Grupo de Amigos del País Vasco.

La intervención de Otegi en el Parlamento Europeo ha causado malestar entre las víctimas del terrorismo de ETA. De hecho, ayer mismo, la eurodiputada de UPyD, Maite Pagazaurtundua, y la del PP, Teresa Jiménez-Becerril, convocaron un minuto de silencio en las puertas de la Eurocámara coincidiendo con la visita del dirigente abertzale.

Ambas parlamentarias también enviaron la semana pasada al presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, una carta en la que le solicitaron que expulse del Parlamento a Otegui si éste hace apología del terrorismo. Esta misiva fue respaldada por parlamentarios de PP, UPyD, Ciudadanos e independientes del Grupo ALDE. Los eurodiputados de PSOE, IU, Podemos y PNV no firmaron la petición.

Arnaldo Otegi ha aprovechado su visita para defender «una política nueva» y para criticar lo que ha calificado de «estrategias de tintas de calamar» del Gobierno español que, en su opinión, buscan instrumentalizar el conflicto vasco para «ocultar los graves problemas» del Estado español, instando al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, a no instrumentalizar su figura.

Otegi ha avisado de que «las estrategias de tinta de calamar que pretenden mediante esa instrumentalización (*) no van a funcionar» y ha apostado por «una política nueva». «Ni la situación económica, ni la situación de crisis estructural ni la situación de las naciones sin Estado ni la falta de dialogo son el camino de futuro», ha concluido.