El consejero de Interior catalán señala la presencia de anarquistas italianos y franceses en los disturbios de Barcelona
La Policía investiga el papel de ciudadanos extranjeros en las manifestaciones violentas de los últimos días
Entre los 14 detenidos por los disturbios en Barcelona este sábado, «cinco son anarquistas italianos y uno francés» , ha dicho el conseller de Interior de la Generalitat, Miquel Sàmper.
«Hay detenidos de muchos grupos y heterogéneos. Hay gente que proviene del extranjero. De las catorce detenciones hechas el sábado pasado, siete estarían en el marco del movimiento anarquista», ha dicho el conseller de Interior.
Según una fuente policial citada por Reuters, la policía está investigando el papel de ciudadanos extranjeros en los disturbios debido al encarcelamiento del rapero Pablo Hasel.
Durante la conferencia de prensa, Sàmper ha asegurado que los Mossos se enfrentan a una «situación compleja sin precedentes», debido a las reuniones de los manifestantes y su rápida actuación.
Desde que estallaran las protestas el 16 de febrero por el encarcelamiento de Hasel, la policía catalana ha detenido a más de 100 personas. Estas manifestaciones se intensificaron el sábado, cuando una camioneta de la Policía fue incendiada con un oficial en el interior, que logró escapar. Los manifestantes también destrozaron las fachadas de tiendas y bancos, incluso a lo largo de La Rambla de Barcelona.
Uno de los extranjeros arrestados estaba relacionado con el ataque de la camioneta, dijo la fuente citada por la agencia.
El movimiento anarquista europeo ha encontrado en Barcelona un lugar donde llevar a cabo sus actuaciones violentas y se ha convertido en una especie de laboratorio para estos grupos antisistema. Como contaba ABC el sábado , desde 2010 los informes policiales alertaban de las actuaciones de estos grupos, donde se llegó a detectar a líderes de otros países -italianos, franceses y griegos- para impartir cursillos.
Ya el domingo, el conseller de Interior dijo que un grupo de entre 150 y 200 manifestantes participaron en la violencia directa sin aparente razón y se encontraban detrás de los disturbios.
Organizaciones empresariales y sindicatos policiales han exigido una acción gubernamental más firme contra los disturbios después de que los daños a la propiedad ya ascienden a más de dos millones de euros.
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