Echenique culpa al PSOE y sus ataques a Unidos Podemos de "engordar a la derecha"

Podemos ha valorado esta mañana los resultados del 26-J como un mal resultado, pero se ha evitado explicitar cuáles han sido los errores que han provocado que la coalición no alcanzase los resultados esperados. Clarificar esos errores se pospone hasta que se desarrolle una "reflexión" a partir de "datos objetivos", en palabras de Pablo Echenique.

El secretario de Organización ha sido el encargado de dar la cara para explicar la primera valoración del partido después de la Ejecutiva que se ha desarrollado esta mañana. Echenique ha pospuesto cualquier valoración sobre los errores propios, y ha descargado la responsabilidad en factores externos. Y ha apuntado directamente al PSOE. "La campaña de ataques del PSOE a Unidos Podemos puede haber engordado a la derecha", ha acusado Echenique.

Además ha reconocido que "todo parece indicar que vamos encaminados a un Gobierno encabezados por el PP", y ha resaltado que el líder del PSOE, Pedro Sánchez no ha respondido todavía al mensaje que le mandó anoche Pablo Iglesias para mantener una conversación. El líder de Podemos abandonó el recinto mientras los periodistas continuaban en la sala de prensa, y abordado por un par de periodistas que esperaban fuera del recinto se ha dicho dispuesto a "tender la mano", en referencia clara al PSOE. Aunque Echenique en sala de prensa decía en ese mismo momento que no iban a apoyar la fórmula PSOE-Ciudadanos.

Ahora mismo son dos los factores más determinantes que están encima de la mesa como posibles causas de un resultado muy por debajo de las expectativas. Por un lado la confluencia de Podemos con Izquierda Unida y por otro el diseño de campaña. La primera es más achacable a Pablo Iglesias y la segunda a Iñigo Errejón. Por eso, Echenique ha tratado de calmar unas aguas que a buen seguro se revolverán en los próximos días y ha querido resaltar que ambas decisiones fueron "consensuadas".

Parece evidente que perdiendo más de un millón de votos respecto al 20-D la unión con Izquierda Unida ni sumó ni multiplicó, sino que al final, restó. Pero tanto ayer Iglesias como hoy Echenique quisieron plantear ese camino como irreversible. "No valoramos el acuerdo amplio de Unidos Podemos desde el punto de vista táctico y electoral, entendemos que es algo más estructural. No sabemos que efecto ha tenido electoralmente. La valoración positiva no tiene que ver con su rédito electoral. Entendemos que esa conformación del bloque de cambio es muy positiva para nuestro país".

Por otro lado el diseño de campaña, que Echenique también ha defendido como consensuado, presentó a un Pablo Iglesias de perfil bajo. Algo que no ha gustado en muchos sectores del partido. Esta mañana, en diferentes intervenciones en medios, Juan Carlos Monedero ha expresado sus críticas sobre esta estrategia: "No puesdes estar estar solo en las televisiones, la gente tiene que verte en la calle", ha planteado, respecto a una estrategia que redujo la campaña de Iglesias a muy pocos actos. Pero también ha cuestionado el tono escogido. "Ha habido una decisión errónea en Podemos de hacer un discurso hueco. Después del debate a cuatro pantee que Pablo Iglesias parecía un león enjaulado".

Todo eso es lo que Podemos tratará de dirimir. ¿Qué ha fallado? ¿La confluencia? ¿El discurso de campaña? ¿Los meses previos en los que Iglesias se enfrentó al PSOE? ¿Todo a la vez? Echenique ha reconocido que en la partido no saben qué ha fallado. "Sería poco productivo aventurar algún error. Se abre un periodo de reflexión profunda". En más de una ocasión ha mostrado lo que no es otra cosa sino incredulidad: "Hemos decidido analizar demográficamente el resultado y hacer un análisis riguroso. Nadie sabe porque el resultado no ha sido lo que esperábamos".

Cuestionado por posibles influencias en los resultados, como el Brexit, las encuestas infladas o la campaña "del miedo", Echenique ha reconocido que todos esos facotres pueden haber tenido alguna influencia. Ehenique sí ha manifestado que al menos plantean una "limitada satisfacción" por haber mantenido la representación, lo que a su juicio representa la "robustez de ese espacio de cambio" pese a que ha criticado "una campaña en la que las otras tres fuerzas políticas se han puesto de acuerdo para atacarnos al unísono".