Dijsselbloem cree que se está saliendo de la crisis aunque ve mayores riesgos

El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, ha afirmado este jueves que la Unión Europea (UE) está saliendo de la crisis, aunque reconoció que han aumentado los riesgos, que consideró principalmente externos, y reconoció que el sector bancario aún presenta algunas «cuestiones» por resolver.

Dijsselbloem ha afirmado en la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios de la Eurocámara que «de alguna manera, la crisis sigue viva en nuestra cabeza y por poco que pasa» vuelven a saltar las alarmas. Además el político holandés ha resaltado que pese a las tensiones que han afectado a la UE, la zona está «económicamente bien» en comparación con otras regiones.

En concreto, ha señalado a Estados Unidos, cuyo niveles de crecimiento dijo que se han igualado en la zona del euro, aunque «Estados Unidos viene de arriba y está ahora yendo hacia abajo», y en cambio la eurozona está «yendo gradualmente hacia arriba».

Sin embargo, ha señalado que no obstante aún es necesario hacer más esfuerzos: «Estamos yendo en la buena dirección», ha concluido.

Defensa de la banca

El también ministro de Finanzas de Holanda ha negado que los bancos europeos estén «terribles» y defendido, por el contrario, que el sector se encuentra «mucho mejor» que hace unos años, aunque reconoció que sobre algunos pesan «cuestiones heredadas» y los créditos morosos. Al hilo de lo anterior ha añadido que estos deben ser gestionados, pero «no hay una varita mágica» para hacerlos desaparecer.

El presidente del Eurogrupo ha pedido dar «pasos decisivos hacia una mayor reducción de riesgos y una situación de igualdad de condiciones para los bancos». También ha señalado, ante las turbulencias que han lastrado recientemente a los bancos, que «a menudo no estoy de acuerdo con los mercados y estos a menudo no están de acuerdo consigo mismos».

En esta línea, sí ha reconocido, no obstante, que hay «cuestiones» pendientes de resolver en los bancos europeos, como la gestión de los citados créditos morosos o los ajustes que tendrán que hacerse con motivo de la aplicación de las reglas de resolución bancaria europeas.

Dijsselbloem se ha mostrado sorprendido por que los tenedores de «cocos» -bonos convertibles en acciones bajo determinadas circunstancias- se den cuenta ahora de que si los bancos donde los compraron tienen problemas, pueden ser «golpeados» por un rescate interno.

«¿Dónde está esa gente? ¿Es que no lee sus contratos? Han comprado productos que ahora pueden ser afectados por los rescates internos. Pero si son minoristas que no han sido apropiadamente informados, eso es una preocupación real», dijo. No obstante, ha señalado que eso es una «cuestión heredada» y que la banca europea «estructuralmente está mucho mejor».

Grecia

Respecto a Grecia, Dijsselbloem ha señalado que la «mayor preocupación» es la «calidad de las reformas» que sus socios exigen al Gobierno liderado por Alexis Tsipras dentro de las condiciones que tiene que cumplir a cambio del tercer rescate, y dijo que Atenas debe actuar ahora para poder acabar la primera revisión de las mismas cuanto antes. También ha mencionado que el Eurogrupo está dispuesto a analizar las consecuencias económicas que podría tener la reunificación de Chipre.