El Banco de España cifra en 42.561 millones el coste del rescate a la banca para las arcas públicas

El rescate de cajas de ahorros y bancos dejará una abultada factura para el erario público . En la última década, el Estado, a través del Fondo de Reestructuración Bancaria Ordenada (FROB), ha inyectado al sistema financiero un total de 56.598 millones de euros en forma de capital, esquemas de protección de activos y garantías concedidas a bancos que absorbieron entidades nacionalizadas. Según los últimos cálculos del Banco de España, con datos a cierre de 2018 y publicados este miércoles, de esa cifra solo son recuperables 14.037 millones, lo que arroja unas pérdidas para las arcas públicas de 42.561 millones. Si se suman las ayudas aportadas por los propios bancos a través del FGD, el coste final del rescate asciende a 65.725 millones de euros .

Hasta la fecha, el FROB ha podido recuperar 4.477 millones de euros prestados a un total de siete entidades financieras, lo que no quiere decir que su rescate haya salido gratis. Con el de Catalunya Banc el Estado ha perdido 11.817 millones, el más caro por delante de Novacaixagalicia (8.621), Banco de Valencia (6.103), Caja España Duero (955), Cajasur (392) y Banco Gallego (245 millones). Solo Banca Cívica , adquirido por Caixabank; Caja 3 , absorbida por Ibercaja, y Liberbank han devuelto íntegramente sus ayudas.

A esa cifra de casi 4.500 efectivamente recuperados habrá que sumar lo que el Estado obtenga con la venta de la participación del 61,78% que aún tiene en BFA-Bankia, grupo que absorbió además otras nacionalizada, BMN . Hasta la fecha, la entidad financiera presidida por José Ignacio Goirigolzarri ha devuelto 3.083 millones con la venta de dos paquetes de acciones en 2014 y 2017 y el pago de dividendos, pero aún no computan como reintrados. En todo caso, el Banco de España, en base a la valoración que el FROB hace de esa participación, estima que podrá recuperar 9.560 millones de los 24.069 que recibió el cuarto banco del país. Esa cifra es casi 300 millones menos que los 9.857 millones a los que se valoraba hace solo un año la participación del FROB en Bankia, pero que desde entonces se ha depreciado por la caída en Bolsa del a entidad.

De cumplirse esas previsiones, el Estado solo podrá recuperar una cuarta parte —el 24,8%— de las ayudas públicas totales inyectadas al sector desde 2009. Ese cote de 42.561 millones para el Estado es superior al de 42.017 que el Banco de España estimaba un año antes. El incremento de esta factura se debe fundamentalmente tanto a esa depreciació de casi 300 millones de euros de Bankia como a que el FROB también ha elevado la pérdida esperada en la Sareb en 382 millones, debido a los números rojos que arrastra el llamado banco malo, del que el Estado posee el 45% del capital. Además, las garantías concedidas por el fondo de rescate a BBVA por absorber Catalunya Banc han aumentado en 21 millones.

No solo el FROB ha contribuido a apuntalar entidades en apuros, sino que los propios bancos, a través del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) , han aportado al rescate un total de 23.912 millones, cifra que aumenta respecto al año anterior debido al mayor recurso a los esquemas de protección de activos de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), que protege a su comprador, el Sabadell, y de Unnim, entidad que digirió BBVA. Sumando ayudas públicas y sectoriales, el total de dinero usado en el rescate asciende a 80.510 millones. De esa cifra, el organismo dirigido por Pablo Hernández de Cos solo ve recuperable 14.785 millones, el 18,4% del total, lo que arroja una factura total de 65.725 millones.