La banca logra que la moratoria hipotecaria no le obligue a aumentar sus provisiones

Las entidades financieras, según el decreto aprobado por el Gobierno, deberán comunicar al Banco de España los aplazamientos concedidos

El Banco de España será informado por parte de las entidades de las moratorias concedidas REUTERS

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El Gobierno de PSOE y Unidas Podemos ha aprobado una moratoria de al menos un mes en el pago de la cuota de la hipoteca para aquellos trabajadores y empleados que se vean afectados económicamente por la crisis del coronavirus . El gran temor de la banca a esta medida, que ya adoptó también Italia, era que obligase a las entidades financieras a aumentar las provisiones frente a pérdidas por esos créditos, pues desde un punto de vista contable ese aplazamiento puede considerarse un impago. Pues bien, el decreto aprobado ayer por el Consejo de Ministros exime a los bancos de hacer dotaciones por esas moratorias.

«Una vez concedida la moratoria la entidad acreedora comunicará al Banco de España su existencia y duración a efectos contables y de no imputación de la misma en el cómputo de provisiones de riesgo» , señala el texto legal, que detalla que en el plazo de la moratoria pactado el banco no podrá cobrar al deudor ni el principal ni los intereses generados, como tampoco aplicar la cláusula de vencimiento anticipado.

Las entidades financieras, que ayer través de sus patronales respaldaron la moratoria aprobada, solo podrán evitar las provisiones por aquellas hipotecas cuyo pago hayan aplazado a raíz única y exclusivamente del impacto económico del coronavirus. En estos casos, el supervisor no computará el plazo de la moratoria a ojos de empezar a hacer las dotaciones que marca la normativa contable ante cualquier impago.

La norma actual eleva el volumen de las provisiones a hacer por un crédito según el cliente esté manos o menos al corriente de pago. Está el crédito normal, aquellos que pueden sufrir ya el impago de una cuota y se consideran normales bajo especial vigilancia, y los préstamos con impago de más de tres meses o «dudosos». De no haberse eliminado la obligación de hacer provisiones en este caso, la moratoria hipotecaria supondría para los bancos un fuerte incremento de las dotaciones para los bancos en caso de aplazamientos superiores a los tres meses, algo no descartable en función de la duración de la crisis. En Italia, por ejemplo, la norma contempla que la moratoria se extienda hasta 18 meses .

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