Así juega Rumanía

España quiere volver al Grupo Mundial de la Copa Davis. Para ello, deberá empezar por derrotar a una Rumanía muy alejada de sus épocas de mayor esplendor. Si bien en el ámbito femenino tiene jugadoras de la talla de Simona Halep o Monica Niculescu, en hombres no tiene ningún jugador entre los 100 primeros clasificados.

En sus enfrentamientos previos en la competición, España domina por tres a uno. Sin embargo, el último data ya de hace 41 años. Por aquel entonces, los de Europa del Este se codeaban con la élite tenística encabezados por Ilie Nastase y llegaron a tres finales de Copa Davis casi consecutivas: 1969, 1971 y 1972. Hoy aspiran a volver a ser grandes aunque, sobre el papel, el conjunto que presenta Andrei Pavel es inferior al de Conchita Martínez.

Copil, líder en individuales

Marius Copil es el tenista rumano con mejor clasificación ATP de la actualidad, en la que ostenta el número 163. Llegó a ser el 124 hace casi tres años. En la anterior eliminatoria de Copa Davis, en la que Rumanía se impuso como local a Eslovenia, venció a Blaz Rola por 7-5, 6-3 y 7-6 (5) y, ya con la eliminatoria decidida, a Tomislav Ternar por un doble 6-3. La eliminatoria se disputó en pista dura cubierta y actuaron como locales, al igual que ocurrirá en el enfrentamiento contra España.

Su mejor resultado este año es la final del Challenger -torneos ATP de menor categoría- de Surbiton, en hierba. En los Grand Slam tan solo ha conseguido pasar la previa de Wimbledon, donde cayó en primera ronda. Tiene un buen récord de 10-4 en individuales de la Copa Davis y de 2-2 en el dobles. La mejor arma de Copil, de 25 años, es su potente saque y su superficie favorita es, precisamente, la que los rumanos han escogido para recibir a España.

Ungur, veterano escudero

Con 31 años, Adrian Ungur ya está lejos del nivel que lo llevó a ser el número 79 del mundo a mediados de 2012. Al igual que Copil, es diestro y golpea el revés a una mano, aunque prefiere la tierra batida como superficie. Ante Eslovenia, consiguió remontar dos sets en contra a Grega Zemlja para anotar el segundo punto en el marcador de los rumanos.

Su participación en los grandes este año ha sido similar a la del número uno rumano: solo ha conseguido pasar la previa de uno de ellos, Roland Garros, donde perdió en primera ronda. Fuera de la tierra parisina, su mejor resultado han sido los octavos del ATP 250 de Estambul, donde estuvo cerca de derrotar a Grigor Dimitrov. Tiene un balance en Copa Davis de 10-9, todos jugados en individuales.

Tecau y Mergea, pareja segura

El dobles que presentan los rumanos es, sin ninguna duda, su mayor fuerte. Horia Tecau es el número diez de la clasificación masculina de dobles, aunque llegó a ser el dos hace apenas ocho meses. Tiene un registro de 12-8 en la Davis como doblista y de 0-2 en individuales aunque, en principio, sus esfuerzos se centrarán exclusivamente en el punto por parejas.

Su mejor resultado este año fue la victoria en el Mutua Madrid Open con su pareja habitual en el circuito, el holandés Jean-Julien Rojer. Fue ganador de Wimbledon, siempre en la modalidad de dobles, el año pasado y finalista en otras tres ocasiones. Sin embargo, esta no está siendo su mejor temporada en los Grand Slam, yendo claramente de más a menos: cayó en cuartos del Abierto de Australia, en segunda ronda de Roland Garros y en la primera de Wimbledon.

La pareja de Tecau tampoco se queda atrás en la clasificación de dobles. Florin Mergea es el número 16 y, como tope, alcanzó el séptimo puesto hace justo un año. En la Copa Davis ha vencido en siete ocasiones y caído en cinco como doblista, mientras que presenta un 1-1 en individuales. Al igual que Tecau, salvo sorpresa, solo disputará el punto de su especialidad.

Su mejor resultado este año es la final del Mutua Madrid Open. Allí cayó junto a su habitual pareja en dobles, el indio Rohan Bopanna, precisamente ante su compatriota Tecau. En Grand Slams, perdió en los octavos de Australia, en los cuartos de Roland Garros y de nuevo en los octavos de Wimbledon.

Juntos, Tecau y Mergea han disputado diez partidos de dobles de la Copa Davis. Aunque no tengan por norma competir como pareja durante el año, su balance cuando coinciden defendiendo los colores de Rumanía es muy positivo para los intereses de los locales: siete victorias por tan solo tres derrotas.