Piqué y el "caso Griezmann" evidencian el divorcio entre la plantilla y la directiva

El malestar de la directiva del Barcelona con Gerard Piqué a raíz del desenlace del «caso Griezmann» , que decidió quedarse en el Atlético de Madrid cuando parecía hecho su fichaje por el club azulgrana, es la punta del iceberg de una inexistente relación de la Junta con la plantilla culé. Muchos de los rectores de la entidad catalana acabaron más encolerizados por la forma en la que se enteraron que por la decisión en sí del delantero francés. No acaban de digerir que Gerard Piqué, cuya productora se encargó de realizar el documental en el que Griezmann dio calabazas al Barça, supiera antes que nadie la decisión del galo. Aunque el propio Piqué desveló que se lo había comunicado el mismo día por la mañana al presidente Bartomeu lo cierto es que la mayoría de directivos y ejecutivos se enteraron en tiempo real viendo la televisión .

No es la primera vez que ocurre algo así. El año pasado, en plena pretemporada, Jordi Mestre se afanaba en asegurar que Neymar se quedaría en el Barça «al doscientos por cien», mientras que el brasileño ya tenía decidido que se iba a marchar al PSG. Y lo peor de todo es que prácticamente todos sus compañeros del Barcelona lo sabían mientras que la Junta directiva esperaba una respuesta del propio Neymar. Posteriormente, Gerard Pique reconoció que en la boda de Messi , Neymar ya les había dicho que se iba y los directivos del Barcelona aún le guardan que no lo hubiera desvelado dejándoles sin margen de actuación.

Precisamente, una de las decisiones para solventar este problema y la falta de conexión y entendimiento con el vestuario culé ha sido el fichaje de Eric Abidal, una persona con alta aceptación entre los pesos pesados del equipo pero con escasos conocimientos del mercado futbolístico mundial.. De hecho, le han colocado a Ramón Planes como adjunto para que se encargue de las tareas reales de secretario técnico mientras él puede hacer de enlace entre los cracks y los que mandan. «Creo que además de la experiencia que tengo en el mundo del fútbol, conozco muy bien el vestuario y la actitud de los jugadores , pero sobre todo dar los valores que siempre he tenido. Intentar compartirlo con los jugadores y hablar con el entrenador, que quiere un equipo competitivo. Para mí es un orgullo formar parte del club de nuevo. El objetivo es ganar títulos. Tengo experiencia y, por tanto, puedo hacer que tengamos una comunicación interesante y podamos tomar buenas decisiones para el club», reconoció Abidal durante su presentación.