WNBA
Sabrina Ionescu, nueva número uno del draft, es el «triple-doble viviente»
La base, de 22 años, jugará en los New York Liberty tras acabar la Universidad como la única jugadora en superar los 2.000 puntos, los 1.000 rebotes y las 1.000 asistencias
La base de Oregon, Sabrina Ionescu , cumplió con todos los pronósticos, al ser seleccionada este viernes como la número uno por el New York Liberty en el sorteo universitario de la WNBA.
Ionescu, de 22 años, fue seleccionada durante el sorteo «virtual», después de que las participantes estaban en sus hogares, al igual que Cathy Engelbert, comisionada de la WNBA , mientras anunciaba las elecciones, debido a la pandemia del coronavirus.
En sus primeras declaraciones desde su casa, en California, Ionescu dijo que «he trabajado para esto durante toda mi carrera en el baloncesto y estoy muy emocionada de ver que se hace realidad».
Agregó que «Me siento humilde y emocionada por la oportunidad».
«Todas las seleccionadas estamos muy emocionadas», dijo Ionescu. «Hemos estado hablando entre nosotras todo este tiempo y nos sentimos felices de saber a dónde vamos cada una».
Inmediatamente los aficionados compraron la nueva camiseta que Ionescu usará con el Liberty, e incluso se agotó en sólo una hora.
Además, su compañera de equipo de los Ducks de Oregon, la escolta alemana Satou Sabally, de 21 años, fue seleccionada número dos general por los Dallas Wings.
Según el portal de la NBA , Ionescu ha captado la atención de las estrellas más grandes del baloncesto. Stephen Curry la llamó «el triple-doble viviente». La base terminó la universidad siendo la única jugadora en la historia de la NCAA en alcanzar 2.000 puntos, 1.000 rebotes y 1.000 asistencias. En su último año promedió 17,5 puntos, 8,6 rebotes, 9,1 asistencias y 1,4 robos.
Lebron James también le dio la bendición nombrándola la «Reina» Sabrina. Ionescu mantenía también una relación especial con Kobe Byyant , que echó mano de ella en varias ocasiones para que diera clases magistrales a las jugadores del equipo de su hija Gianna.
Después de la muerte de la estrella de los Lakers y de la pequeña Gigi, Ionescu fue de las pocas personas en hablar durante el tributo que les brindaron en Los Ángeles. «Crecí viendo a Kobe y quería ser como él, amar la competición, el trabajo duro, llegar la primera e irme la última», contó.
