Dos mojonazos

Dos grandes mojonazos. Esa es la crónica deportiva de las primeras jornadas del Cádiz CF en LaLiga. A partir de ahí, habrá que mirar otros matices que pasan por la gestión. Y para empezar ya digo que Vizcaíno y Contreras le deben dinero al socio.

El presidente del Cádiz CF y su mano derecha pusieron un precio a los abonos en el que los socios asumimos que como empresarios ponían la cantidad que estimaban oportuna por el espectáculo que ofrecen. A mi juicio desequilibrado en muchos tramos, aunque es otro debate. Pero resulta que esos empresarios han cobrado un precio en julio por un espectáculo que empieza en agosto y que está incompleto. Faltan fichajes, es decir, faltan actores en ese circo. Por tanto, señores empresarios, creo que me deben dinero y si el año que viene lo vais a volver a hacer así, no cobrar hasta septiembre.

Y es que da la sensación que tenemos gente arriba más empresarios que futboleros. Siempre he pensado que Vizcaíno era buen presidente porque lleva toda su vida en esto del fútbol, pero es que esto del fútbol va de jugar a la pelotita más que de frases hechas para aparentar ser futbolero y grande, como aquella de «no tenemos nada que celebrar».

Dejaros, Contreras y tú, de grandezas extradeportivas, de guerras políticas por terrenos como el de Delphi y centraros en lo importante de esto, en la puñetera pelotita, en hacer un equipo de nivel, en no dar esa sensación de club de tiesos que no es capaz de pelear un fichaje a nadie.

Odio eso de «un fichaje ilusionante» que se suele hablar en verano, porque al final el verde es el que dicta y pone la verdad en la mesa, pero no es que hagan algo ilusionante, es que no tienen ni acabada la plantilla.

Dele eso a los socios, sus clientes, a los que ha cobrado en el mes de julio, en vez de apelar en cartas temerosas al sentimiento de la unión y el cadismo. Ustedes pongan los mimbres de lo deportivo que el sentimiento ya lo gestionamos nosotros.