A veces, tenemos la sensación de que el tiempo vuela, que no llegamos a todo y que necesitaríamos más horas en el día pero, realmente, esto también nos habla de que no estamos gestionando bien el tiempo o que no ordenamos bien la distribución de las diferentes tareas. Y esto, nos puede conducir a un incremento del estrés , de la sensación de frustración o de falta de eficacia porque sentir que no llegamos a todo puede causar un malestar interno que puede conducirnos a una baja estima.
Invertir un tiempo en organizar la mente para mejorar la calidad y realidad de nuestra agenda diaria nos retribuirá mucho más beneficio que la espiral de la queja . La búsqueda del equilibrio interno nos permite enfocarnos y reajustar, a cada instante, el tiempo a las tareas, a las nuevas demandas que puedan surgir, estando abierto y flexible para priorizarlas y abordarlas ajustándonos, a cada instante, a la realidad de tu presente.
En la meditación de esta semana, te invitamos a organizar tu mente , desde la calma, para gestionar mejor tu tiempo. Porque al fin y al cabo, lo urgente, muchas veces, no concuerda con lo realmente importante.
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