Ciruela

Con el verano llega la temporada de las frutas de hueso : cerezas , albaricoques , melocotones o ciruelas . Una explosión de color y de sabor, frutas tiernas y jugosas a la vez que crujientes. Originarias del Caúcaso, Anatolia y Persia (en la actualidad Turquía e Irán) pero eran los persas los que conocían diferentes variedades de cultivo . Actualmente, los principales países productores son Chile, Argentina, Estados Unidos y España, siempre en zonas templadas. En su época de floración, entre febrero y abril, sus ramas se cubren de un manto de flores blancas agrupadas de gran belleza. De hecho, el ciruelo es en China el símbolo de los huertos frutales.

Entre sus distintas variedades no hay solo sutiles diferencias sino que existen cambios de forma, color y, por supuesto, sabor. Las hay amarillas, rojas, negras o verdes y cada una tiene sus propias características.

Amarillas : sabor ácido y mucho jugo.

Rojas : más dulces que las amarillas.

Negras : ideales para cocinar y utilizar en repostería.

Verdes : las más dulces.

Lo ideal es comprarlas maduras, asegurándonos de que sean firmes y cubiertas de un ligero polvillo mate. Siendo así, hay que consumirlas en los dos o tres días siguientes y conservarlas en el frigorífico. Sin embargo, si se compran cuando aún están verdes, lo ideal es dejarlas a temperatura ambiente para que maduren.

Comer una ciruela aporta 60 kcal, por lo que suele incluirse en las dietas de pérdida de peso. Además, las ciruelas son ricas en antocianos (especialmente las variedades de colores rojos y morados), unas sustancias con propiedades antioxidantes que contribiyen a frenar los efectos de los radicales libres sobre la piel.

Las ciruelas puedne contribuir, además, a combatir el estreñimiento , graicas a su aporte en agua, fibra y sorbitol, pues esa combinación provoca un efecto laxante que ayuda a regular el tránsito intestinal. Por su elevado contenido en potasio y su mínimo aporte en sodio es un alimento diurético , que favorece la eliminación de líquidos .

Red beauty : Es la primera en llegar al mercado español. De color vinoso, pulpa amarilla, carnosa y jugosa con un sabor bastante insípido, ligeramente ácida.

Claudia Reina Verde : De color verde oscuro, es la más dulce y muy utilizada para mermeladas y compotas.

Golden Japan : De piel amarilla clara pajizo, brillante, gruesa, resistente y de pulpa muy jugosa y extremadamente dulce

Santa Rosa : Originaria de la ciruela silvestre asiática, son frutos de tamaño grande, redondeado y acorazonado. Su piel es de un color rojo intenso y su carne, amarillo ámbar, muy jugosa, dulce y perfumada. Su delicadeza hace que se estropee con gran facilidad, por eso cada vez se cultiva menos.

Reina Claudia de Oullins : Es una de las más extendidas. De color verde claro y dorado, su carne es pálida y muy jugosa.

Laetitia y Larry Ann : Estas son ciruelas de importación ya que no se producen en España. Son ciruelas moradas y muy grandes.

Metley : estas ciruelas se conocen comercialmente con el nombre de ciruela fresa por su piel de color morado, su pulpa jugosa de color rosáceo intenso y sabor muy dulce similar al de la fresa.

Arandana : son frutos de tamaño medio y color de piel granate oscuro, y la pulpa, aunque es carnosa, no destaca por su dulzor.

Ciruelas pasas : Es muy habitual consumir las ciruelas secas durante todo el año ya que es una fruta de corta temporada. El ciruelo se estableció en toda la cuenca mediterránea desde China impulsado por Griegos y Romanos a través de la ruta de la seda. Se secaba para su conservación y utilización todo el año y se hacía al sol o en los hornos de pan. Este fruto seco cubría las necesidades alimentarias en los grandes viajes de las caravanas o en las travesías por el mar y durante las malas temporadas.