Xenofobia

Aunque en ocasiones los términos « xenofobia » y « racismo » se usan indistintamente en contextos de intolerancia frente a la multiculturalidad , lo cierto es que estas palabras no significan lo mismo pues la xenofobia se asocia a la intolerancia cultural y está más emparentada con la idea de exaltación de valores localistas en desmedro de los valores que provienen de otra cultura.

«Xenofobia», según el Diccionario Panhispánico de Dudas, es la fobia al extranjero o inmigrante. Las manifestaciones xenófobas pueden ser desde un simple rechazo hasta las agresiones más graves. En general, puede llegar a basarse en un sentimiento de protección de una nación, aunque a veces también puede ir unido al racismo, o a la discriminación ejercida en función de la raza.

Este tipo de discriminación tiene su origen en distintos prejuicios históricos, religiosos, culturales y nacionales , que llevan al xenófobo a justificar la segregación entre grupos étnicos con el fin de no perder la identidad propia. Por otra parte, en ocasiones se suma un prejuicio económico que considera a los inmigrantes como una competencia por los recursos disponibles en una nación.

Algunos de los prejucios xenófobos más extendidos son considerar superior la cultura del mundo occidental, temer perder la identidad propia, vincular el paro y la delincuencia a los inmigrantes y relacionar el robo y el tráfico de drogas con los gitanos. Así, según estos prejuicios el extranjero se convierte en un elemento amenazante según una percepción xenófoba.

En la prácica la xenofobia suele ir acompañada por un rechazo étnico (o incluso abiertamente racista). De hecho, resulta difícil encontrar posiciones xenófobas frente a personas que provienen de países de un entorno occidental.

La Comunidad Europea aprobó el 16 de septiembre de 2008 en la cumbre de Bruselas la «Ley contra la Xenofobia y el Racismo» que condena hasta con tres años de cárcel los comportamientos xenófobos y racistas. Según esta normativa, se considera delito la incitación pública a la violencia o al odio dirigidos contra una persona o un grupo de personas definido en relación con la raza, el color, la religión, la ascendencia o el origen nacional o étnico; así como el uso para este fin de difusión o reparto de escritos, imágenes u otros materiales. Otros comportamientos que se consideran delito son la apología pública, la negación o la trivialización flagrante de los crímenes de genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra dirigida contra un grupo de personas definido en relación con la raza, el color, la religión, la ascendencia o el origen nacional o étnico.