Fe y cultura de un pueblo

Desde 1616 conservamos registros sobre las celebraciones de Semana Santa en la ciudad de Ferrol. Un caminar centenario que va modelando nuestra vida, nuestro carácter. Un in crescendo que ha convertido la semana grande de los cristianos en la semana grande de la ciudad departamental. Porque desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección —con la coda del lunes de Pascua, Nuestra Señora de Chamorro, patrona de la localidad—, los ferrolanos nos echamos a las calles para acompañar las imágenes del Señor y de su Madre, para hacer pública profesión de fe.

Que no otra cosa son nuestras procesiones. Decía el beato Pablo VI que la religiosidad popular «refleja una sed de Dios que solamente los pobres y los sencillos pueden conocer...

comporta un hondo sentir de los atributos profundos de Dios... engendra actitudes interiores que raramente pueden observarse en el mismo grado en quienes no poseen esa religiosidad». Es la «religión del pueblo» llega a afirmar el sabio Papa Montini. Es la fe entregada al pueblo, asumida por él, que, interiorizada, es capaz de conformar su arte, su cultura, su vida. Las cinco cofradías de la ciudad, Dolores, Angustias, Merced, Soledad y Santo Entierro, como son conocidas, son esmerado ejemplo de ese cristianismo hecho cotidianeidad, plasmado sobre la cuadrícula ilustrada de nuestras calles.

Su labor no se limita a ocho días: a lo largo de todo el año, las hermandades son testimonio de amor cristiano. Sus cofrades crecen en el seguimiento de Jesús, y desarrollan una constante preocupación solidaria tanto entre sí, como hacia las diferentes necesidades presentes en la villa. Esta labor evangelizadora culmina en la Semana Santa, en la que presentan los momentos últimos de la vida de Cristo a través del arte en sus procesiones. Desde obras de los siglos XVII y XVIII, hasta aportaciones más recientes de imagineros contemporáneos, las miradas de Jesús y de María descubren cada primavera los barrios de Ferrol, y son capaces de traspasar el corazón de todos aquellos que sepan acogerlas. Es la via pulchritudinis, el camino de la belleza, en el descubrimiento de Dios.

Vivir la Semana Santa en Ferrol es vivir la pasión de Cristo unidos al alma y cultura de un pueblo. Es contemplar el Evangelio hecho imagen y permitir que su presencia transforme nuestra existencia para siempre.

*Fr. José Anido Rodríguez, O. de M. es el pregonero de la semana santa de ferrol de 2017